La prueba Escala, que mide las competencias en escritura, cálculo y lectura, fue realizada a los más de 88.000 alumnos de segundo de Primaria los pasados 31 de mayo y 1 de junio. Es la prueba de diagnóstico educativo más temprana que se realiza en España y además de Andalucía, Madrid también la realizó, aunque en esta comunidad se hizo sobre una muestra de 10.000 niños mientras que en Andalucía participaron todos los escolares de ese curso. Según los resultados avanzados por el consejero, Francisco Álvarez de la Chica, en una entrevista a Europa Press, la nota media obtenida por los niños andaluces es de "notable".
En concreto, en una escala de 1 a 6, la nota media en comunicación lingüística en castellano es de 4,76 y en razonamiento matemático, un 4,35. En el primer caso, el 92,7% de los alumnos se sitúa en los niveles intermedios y altos (del 3 al 6) y solo un 7,3% en los más bajos (1 y 2). En matemáticas, el 85,3% está en los niveles altos y el 14,7% en los bajos.
Pero Escala incluyó también, entre el 2 y el 10 de junio, una prueba de lectura en voz alta realizada a 31.932 escolares de los que el 19,8% leyó de forma "vacilante" y un 4,4% sílaba a sílaba. Del 75,8% restante que no presentó problemas de lectura, el 34,8% fue capaz de leer de forma "adecuada" el texto propuesto, que constaba de 231 palabras, y un 41% lo hizo, además, de forma expresiva, lo que supone un nivel "avanzado". De la Chica calificó estos resultados de "satisfactorios".
Esta prueba fue diseñada, como el resto, por un comité de expertos propuesto por la Inspección Educativa (formado por profesores universitarios y maestros con métodos eficaces para enseñar a leer) y realizada por la Agencia de Calidad Educativa. En concreto, medía varios parámetros como el modo de lectura, la velocidad, la exactitud, la comprensión, el nivel de identificación de ideas, el reconocimiento de signos de puntuación o el procesamiento sintáctico. En cuanto a la velocidad, según avanzó este periódico, se estableció una horquilla de entre 70 y 80 palabras por minuto como garantía de comprensión y fluidez de lectura para niños de siete años.
El consejero de Educación defendió que la prueba Escala se convertirá en los próximos años en una "potentísima herramienta" para detectar, desde las edades más tempranas, "dónde están las dificultades más severas" de aprendizaje y "quién las tiene" para corregirlas. Educación ya ha remitido los resultados a los colegios, que darán a los padres un informe individualizado de su hijo al comenzar el curso.
De la Chica reconoció que "si a ese aproximadamente 20% de niños que han demostrado dificultades con la lectura no se le corrige pronto, inevitablemente sacarán el ticket del fracaso escolar". Un 10% de los niños han repetido algún curso antes de terminar sexto de Primaria (11 años) mientras que en ESO, el número de repetidores sube al 43%. Un 37% del alumnado andaluz abandona los estudios sin obtener el título de graduado.