Unos 3.000 trabajadores del Ayuntamiento de Sevilla, pertenecientes a las secciones sindicales de CCOO, UGT y CSI-CSIF, se manifestaron hoy en señal de protesta por el incumplimiento del acuerdo de negociación colectiva de 2009, obligando al Consistorio al corte del servicio del tranvía ligero Metrocentro durante una hora.
Concretamente, y con cortes parciales previos, el servicio quedó interrumpido de manera total a partir de las 11,45 horas, mientras que a partir de las 12,22 horas la línea limitó su recorrido hasta el Archivo de Indias, quedando sin servicio temporalmente desde este lugar hasta Plaza Nueva, según informaron a Europa Press desde el Centro de Coordinación Operativa (Cecop).
Desde las 12,50 horas el tranvía ya volvió a recuperar el recorrido habitual. La manifestación, que partió desde el Prado de San Sebastián y ocasionó problemas puntuales de tráfico en Pasarela, tuvo su previa con el encierro durante 24 horas de una treintena de delegados sindicales de CCOO en el Ayuntamiento de Sevilla en la estación de autobuses del Prado de San Sebastián.
Según indicó a Europa Press el secretario general de CCOO en el Consistorio hispalense y presidente del Comité de Empresa, Manuel Gutiérrez, han participado aproximadamente un 90 por ciento de los trabajadores convocados, en los que observó "bastante ánimo de pelear por que se saque adelante el acuerdo tal y como se firmó". "Ha sido un buen respaldo para los sindicatos", subrayó Gutiérrez, que añadió que en el día de mañana mañana nos volverermos a sentar y tendremos q decidir proximas medidas, en la misma linea. ayto habra tomado nota, esperamos alguna reaccion.
Una treintena de delegados sindicales de CCOO en el Ayuntamiento de Sevilla mantiene un encierro de 24 horas de duración, desde las 11,30 horas de ayer, en la estación de autobuses del Prado de San Sebastián, lugar desde donde partirá la asamblea-manifestación de hoy, en señal de protesta por el incumplimiento del acuerdo de negociación colectiva de 2009.
El secretario general de CCOO en el Consistorio hispalense, Manuel Gutiérrez, indicó a Europa Press que los sindicalistas permanecen en el vestíbulo principal de la estación junto con elementos de cartelería con la idea de realizar "una protesta más". Con esta reivindicación y la asamblea-manifestación de hoy, según Gutiérrez, CCOO expresará su contrariedad a la postura de la Delegación municipal de Recursos Humanos, "cuyo titular, Alfonso Mir, se ha negado a aplazar la nueva reunión, tal y como le solicitamos desde el sindicato al entender que hoy no era el día más apropiado". "Queremos hechos, y no palabras, porque Mir ha perdido la credibilidad para nosotros", criticó.
Estas acciones se unen a las acordadas por el Comité de Empresa y la Junta de Personal Funcionario del Ayuntamiento, que aprobaron la pasada semana por unanimidad en Pleno una resolución mediante la cual se acuerda iniciar acciones legales y plantear el conflicto colectivo.
En la última convocatoria de reunión las centrales sindicales denunciaron un plante municipal en una reunión prevista con Mir, que a su vez consideró que se le faltó al respeto al gobierno municipal, ya que en la sala de reunión las centrales sindicales dejaron elementos de 'atrezzo' reivindicativo que el edil socialista consideró "de mal gusto".
El Consistorio ya planteó, a cuenta del anunciado plan de recorte de gastos en materia de personal, prorrogar la anunciada creación de 189 nuevos puestos laborales en tres años, con una fórmula de prórroga en la cual, y debido a la situación económica general, en lugar de cubrirse todo en el presente ejercicio se cubrirían 60 plazas en 2009 --a aprobarse en el Pleno de noviembre--, otras 60 a mediados de 2010 y 69 antes de que el mandato finalice en 2011.
Los sindicatos ya manifestaron su rechazo por boca de Gutiérrez, que explicó a Europa Press que una aceptación de la propuesta por parte de los sindicatos "significaría que no va a haber más creación de empleo ni en 2010 ni en 2011".
Al margen de la negociación por la creación de empleo, la postura municipal pasa por la subida de salarios al 0,3 por ciento marcado legislativamente y la reducción del gasto en productividad, con una paralización de cuestiones como la oferta pública o el proceso de promoción interna.