Tras el subidón de tasas de hace un año, con picos de hasta el 6% y la creación de nuevas tasas, la Gerencia de Urbanismo anunció ayer una revisión a la baja de sus ordenanzas fiscales para 2014, que comprenden desde licencias de obras y veladores hasta los precios por las sillas de la carrera oficial. Una revisión que, en la práctica, consiste en congelar todos los tributos, salvo escasas excepciones, y, entrelíneas, rescatar un planteamiento que el Gobierno de Juan Ignacio Zoido lanzó en el borrador de ordenanzas de hace un año y que tuvo que retirar por el rechazo frontal de la patronal de la construcción:la posibilidad de que se pueda duplicar la tasa por licencia de obras a los casos en los que el valor real de la obra supere un 25% el módulo base fijado por Urbanismo que está cuantificado en 486 euros. Eso, en la práctica, supone utilizar para el cálculo un modelo diferente al pactado por el sector y que, en estos casos que el documento inicial califica de excepcionales, basarse en el coste real de la obra. Por poner un ejemplo, en una construcción que costara en torno a mil euros el metro cuadrado se pagaría el doble de lo que se abonaba hasta la fecha. Ya hace un año, Gaesco tildó la subida y, en concreto, este incremento en la licencia de obras como la puntilla para el sector de la construcción. Tal fue el enfado de la patronal que el Gobierno local retiró in extremis el documento del orden del día del Consejo de Urbanismo alegando que era un borrador elaborado por los técnicos ante los números rojos de la Gerencia y que se presentó sin el consentimiento del propio alcalde. La patronal Gaesco, por el momento, no ha entrado a valor las tasas urbanísticas y esperará a hoy, cuando están convocados a una cita con el delegado de Urbanismo y Medio Ambiente,Maximiliano Vílchez, para abordar estas ordenanzas. El resto de tasas se mantienen en stand by. Ni bajadas ni subidas estas se aplicaron en 2012. Urbanismo defendió sus ordenanzas en que establecen una revisión a la baja, aunque la base de tal revisión pasa por suprimir la subida lineal del 3% que está fijado por una ley el Plan de Ajuste y un porcentaje que se encargó de diseñar el Gobierno local hace un año para ponerse al día en pagos atrasados con los proveedores. En ese sentido, se frena la subida del 3% que ya se aplicó el año pasado. Así, se mantienen congelados las tarifas para quioscos, sillas de la carrera oficial, puestos de Feria y Semana Santa, licencias de ocupación de veladores,... Sólo se detecta un descenso real: en el caso de la venta ambulante, se recoge una bajada que sólo repercute al comercio ambulante en mercadillos del 10%. En la práctica, cada puesto pagará nueve euros por trimestre si trabaja de lunes a viernes (de 92,70 a 83,43 euros) mientras que la rebaja será de 12 euros (de 123,60 a 111,24 euros). También vendieron como rebaja la tarifa cero para rodajes de películas cuando sirven para promocionar la ciudad y cuando el equipo de rodaje resida o se aloje en la capital, aunque ese amnistía ya se puso en marcha hace un año. A eso, se suma otra modificación relativa a la ocupación de la vía pública con quioscos, por la que no habrá recargo para el nombramiento de auxiliar cuando este sea para un periodo inferior al año. También anunció que, por primera vez, asumirán el cobro de la tasa por la ejecución de deslindes en vías pecuarias, labor que antes asumía la Junta de Andalucía. En esa línea, indican que se aplicará la misma tasa, que en la propuesta de ordenanza fiscal se cifra en 2.404 euros por kilómetro. La congelación de los tasas urbanísticas, que será sometida a votación en el próximo pleno municipal, fue entendida por el Gobierno local como una forma de rebajar la presión fiscal a los sevillanos, que será inferior a la de años anteriores. Las palabras son del delegado de Urbanismo, Maximiliano Vílchez, que incluso señaló que esta revisión de los impuestos supone cumplir el compromiso electoral con los ciudadanos, a los que el alcalde prometió una rebaja de impuestos.