El Ayuntamiento de Sevilla ha hecho efectiva, con su publicación en el Boletín Oficial de la Provincia, la enajenación a favor de Detea de las tres parcelas, con sus correspondientes edificios, que actualmente ocupa la Policía Local en la Avenida de Américo Vespucio, en la isla de la Cartuja, con un importe de 20,35 millones.
A cambio de esta adjudicación, la unión temporal de empresas (UTE) compuesta por Detea y Aldesa acometerá y sufragará las obras de la nueva sede central de la Policía Local y del área de Gobernación de Sevilla, que se ubicará en los terrenos de la antigua cárcel de La Ranilla y tiene un presupuesto de 17,45 millones.
Las obras de la comisaría tendrán un coste cero para el Consistorio gracias a la enajenación de estas parcelas, que se encuentran englobadas en el plan especial de la Isla de la Cartuja.
La mudanza de la Policía Local de sus actuales sedes no será efectiva hasta que se termine la construcción de su nuevo edificio de La Ranilla, cuyas obras podrán comenzar entre enero y febrero del año próximo, cuando termine la segunda fase del derribo de la antigua cárcel, sufragado por la Sociedad Estatal de Instituciones Penitenciarias y que tiene un presupuesto superior a los 760.000 euros.
Las tres parcelas con las que se sufraga la obra están ubicadas en la avenida Américo Vespucio y se denominan técnicamente SC-3.1, por la que Detea pagará 4.847.850 euros; SC-4, por la que se abonarán 8.809.052 euros, y SC-5, valorada para su venta en 6.694.606 euros.
La empresa recibirá estos terrenos y los edificios que actualmente alberga la Policía Local a la finalización de la sede nueva de La Ranilla, que ocupará 12.000 metros cuadrados, según explicó el edil de Urbanismo, Emilio Carrillo.
Precisamente el edificio que se quiere levantar junto a la antigua cárcel de La Ranilla provocó las quejas de los vecinos de la zona por su altitud. En principio, la sede de la Policía Local y de Gobernación se planteó con más de cuatro plantas, en contra de lo que dicta la normativa para esta zona que linda con la Avenida de Andalucía y el Tamarguillo. En los suelos de la prisión también se construirá un parque, una reivindicación vecinal desde hace muchos años.
