Como hace 500 años, pero de forma inversa. Cinco siglos después de que la Virgen de Consolación llegara a Utrera, la historia se repite. Sin embargo, en esta ocasión, será de la localidad utrerana de donde partirá una copia de su patrona para emprender un viaje a Cataluña, comunidad en la que residen numerosos hijos del municipio.
En el transcurso de una eucaristía celebrada a mediodía de ayer en el Santuario de Consolación, el rector de este templo, Diego Pérez Ojeda, bendijo la nueva imagen de la Virgen. Es el resultado del encargo que la Casa de Utrera en Cataluña realizó al artista local, Sebastián Martínez Zayas, y que ha visto la luz coincidiendo con la festividad de la Inmaculada Concepción. Su próximo destino es la Parroquia de San Jaime de la localidad barcelonesa de Badalona.
Para recibir la nueva talla, acudieron a Utrera una representación del colectivo catalán, que se mostró muy emocionado al ver "cómo vamos a poder tener parte de nuestro pueblo, a través de la Virgen de Consolación, siempre más cerca de nosotros". Acompañó también este momento un grupo de utreranos residentes en la localidad tarraconense de El Vendrell, municipio con el que está hermanado Utrera. Igualmente, asistieron a la misa, entre otros, la teniente-alcalde del Ayuntamiento utrerano, María Dolores Pascual; varios concejales; el comisario del V Centenario, Salvador de Quinta; y miembros de la Hermandad de Consolación.
La eucaristía finalizó con la interpretación de la Plegaria a la Virgen de Consolación, de Enrique Montoya, cantada por un coro utrerano que acompañó musicalmente el acto. Al término de la misma, el hermano mayor de Consolación, Manuel Ruiz Blanco, impuso la medalla de la patrona a los miembros de la Casa de Utrera en Cataluña, y se produjo el intercambio de sendos cuadros fotográficos con el hermano mayor de la cofradía de Nuestro Padre Jesús de las Penas y Nuestra Señora del Consuelo de El Vendrell.
El escultor de la nueva imagen, en declaraciones a este periódico, cuenta que en ella se puede ver una idealización de la patrona utrerana: "la primera impresión es de la Virgen de Consolación, porque está inspirada en sus cánones, pero todas las facciones están idealizadas, ya que la imagen va a una población donde no están acostumbrados a verla, y había que hacer que se reconociera la belleza de nuestra patrona, y que a la vez resultara atractiva a los nuevos ojos".
En cuanto a las características de la imagen, está realizada en madera de cedro, siendo sus dimensiones las mismas que las de la talla original, salvo que la copia tiene ocho centímetros más de altura, porque "quise cambiar algunos detalles que hicieran reconocibles alguna diferencia con la imagen original". La orfebrería que acompaña a la Virgen (coronas, ráfaga, orbe, media luna y barco), en metal plateado, ha sido creada por Orfebrería Santos, que actualmente se encuentra realizando el paso completo de la Virgen de las Veredas de la Hermandad de los Estudiantes de Utrera. El rostrillo ha sido confeccionado en la localidad de Los Palacios y Villafranca.
La Casa de Utrera en Cataluña instala cada año una carpa en la Feria de Abril de Barcelona. En esta caseta, siempre han tenido como emblema a la Virgen de Consolación, ya que cuentan con un gran azulejo que la preside. Este colectivo quería hacer una copia de "nuestra Virgen, para poder tenerla cerca".