El referéndum tiene pocos visos de ser práctico, ya que su resultado tendría que ser aprobado en una junta de accionistas y en principio contaría con el voto negativo o la abstención de la mayoría, representada por los administradores judiciales, pero una votación es una votación y la tendencia, por lo visto en el primer día, es recuperar el nombre de Benito Villamarín, aunque con poca diferencia sobre la opción de Heliópolis.
Según los datos del club, 733 socios se pasaron ayer por el estadio. Uno de ellos fue el número 2, Alfonso Jaramillo, que ya anunció en su día que votaría por el Villamarín.
También es el nombre preferido entre los grupos contrarios a Lopera, aunque la mayoría se opone a este referéndum porque lo consideran una medida "populista" y de distracción de Luis Oliver. "Lo único que quiere es provocar un problema a los administradores", advirtió José Antonio Tirado, de Por Nuestro Betis.
El Betis, por cierto, ofreció a todos esos grupos la posibilidad de que mandasen algún interventor para supervisar la legitimidad de las votaciones y del recuento, pero sólo una respondió afirmativamente, en concreto la Asociación de Amigos del Centenario. El resto no contestó.
