En declaraciones a los periodistas antes de una reunión con el rector de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla, Vicente Guzmán, Diego Valderas, que ha precisado que la responsabilidad de las decisiones con respecto al citado proyecto las tiene el Gobierno de España, ha manifestado que Doñana es patrimonio de la Humanidad y un preciado bien no solo para los andaluces, sino también para todo el contexto español e internacional.
"Es un escenario que hay que mimar, cuidar y proteger", según Valderas, quien ha precisado que en el modelo de desarrollo sostenible de Andalucía, Doñana juega un papel fundamental.
En este sentido, ha manifestado --después de que miembros de su formación se hayan mostrado contrarios al desarrollo de ese proyecto-- que el Gobierno andaluz tiene que mostrar una profunda preocupación por el mismo y no solo tiene que velar por que se cumplan todas las medidas, sino que tiene que "ir más allá y en un determinado momento fijar posiciones en defensa del patrimonio natural de Doñana".
Ha recalcado que ese patrimonio no se puede poner en peligro y que, en consecuencia, hay que fijar una posición clara desde el Gobierno andaluz, las fuerzas políticas y la sociedad, al tiempo que no hay que olvidar el esfuerzo que se hizo hace tiempo por salvar a Doñana de otras agresiones desde el punto de vista especulativo o económico.
Valderas se ha mostrado convencido de que el Gobierno andaluz va a intervenir con fuerza en este asunto y ha apuntado que él mismo está haciendo un análisis profundo del tema. De hecho, tiene intención de reunirse con la gente que ha intervenido en el Patronato de Doñana sobre este asunto.
Para el vicepresidente, hay que escuchar qué dicen entidades de reconocido prestigio en el terreno del medio ambiente y ha estimado que, si fuera necesario, se podría crear una comisión de expertos que profundice en el asunto.
