Local

Vázquez culpa del choque PSOE-Iglesia a las dos partes

El embajador de España en el Vaticano, Francisco Vázquez, tiró por el camino de en medio en el conflicto entre Iglesia y el Gobierno y repartió culpas entre ambas instituciones, en un intento, otro más, de sembrar algo de calma.

el 14 sep 2009 / 22:40 h.

TAGS:

El embajador de España en el Vaticano, Francisco Vázquez, tiró por el camino de en medio en el conflicto entre Iglesia y el Gobierno y repartió culpas entre ambas instituciones, en un intento, otro más, de sembrar algo de calma.

Vázquez, que calificó de "inoportuna" las frases vertidas por algunos obispos durante la manifestación por la familia cristiana, que se celebró el 30 de diciembre, también recordó que hubo una respuesta "desmesurada por sectores empeñados en una cruzada anti-Iglesia".

"No creo que sea voluntad de nadie que esto sea un tema electoral", añadió Vázquez, que criticó incluso a su compañero de partido, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, "por su calentón y sus excesos verbales". "Hubo excesos, pero después hubo excesos intencionados en la repuesta a aquel acto, porque hay sectores empeñados desde hace tiempo en una cruzada anti-Iglesia, que intenta relegarla a una posición de silencio", reiteró.

Asimismo, calificó el acto de "inoportuno tanto por el escenario como por la forma en que se montó". A dos meses de las elecciones generales, Vázquez consideró que "todo pasa por el filtro electoral". Por ello, señaló que el acto desató polémicas "que no son buenas para nadie" y que, a su juicio, tienen que estar "al margen de la confrontación electoral" porque "no hay ninguna cuestión religiosa que pueda contribuir a dividir a la sociedad española".

Por su parte, la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández De la Vega, afirmó que "nadie va a admitir que desde los púlpitos se trate de condicionar la política".

De la Vega explicó que durante la legislatura "se ha producido un avance importante en la separación de lo que corresponde al Estado y lo que corresponde a la Iglesia", a la vez que incidió en que hay "una ausencia de influencia religiosa en todas las instituciones". Igualmente, aclaró que la intención del Gobierno es "seguir avanzando en esa autonomía y exigir respeto al cumplimiento de las funciones en el ámbito de cada uno de los poderes del Estado".

  • 1