Los residentes en las '99 viviendas' de la barriada sevillana de Los Bermejales acosados por una vecina tildaron ayer de "vergonzosa" la reunión mantenida con el juez decano de Sevilla, Federico Jiménez Ballester, y la fiscal jefe de Sevilla, María José Segarra, y han anunciado que se reunirán en las próximos días para estudiar la viabilidad de una posible huelga de hambre.
El portavoz de los afectados, José Antonio, explicó a Europa Press que, confiando en que la solución a su problema --que para ello pasa únicamente por el desahucio-- "estuviera encima de la mesa" durante el encuentro, los vecinos "han perdido días de manifestación, esperando que se arreglara".
Sin embargo, el juez decano les ha instado a "seguir denunciando y confiar en la justicia", criticó el portavoz del colectivo, que calificó de "insuficientes" las propuestas realizadas en base a "seguir recopilando denuncias o tramitar una orden de alejamiento", pues alegaron que el desahucio "no es de su competencia".
"No tenemos fe en la Justicia", aseguró José Antonio, que ironizó al señalar que "pese a que se expresan muy bien no hay consistencia detrás de ese vocabulario".
Por todo ello, José Antonio se declaró "indignado" por haber "perdido el tiempo" y expresó su convicción de que "hasta que no haya una ruina gorda no van a poner los medios", por lo que, aseguró, en estos días los vecinos se volverán a reunir para "ver qué es lo que hacemos ahora".
Amenazas familiares
Por otra parte, los afectados se enfrentaron hoy con la presunta acosadora a la salida de uno de los juicios de las más de 600 denuncias presentadas por ambas partes. Tras la suspensión de la vista, la demandada se refugió en una sucursal bancaria de la zona para evitar a los periodistas y a los vecinos que la esperaban; ya en el interior de esta oficina se produjo un pequeño altercado entre ambas partes en el que tanto los afectados como la presunta acosadora se intercambiaron insultos y amenazas, requiriendo la presencia policial.
En declaraciones a Europa Press Televisión, una de las víctimas del acoso, María Luisa Reina, pidió que "la desahucien", para que pueda volver a su casa, ya que lleva "más de diez meses viviendo en casa de una amiga".
"A mi hija de cuatro años la ha amenazado, me ha dicho que su hija, que es menor, la va a estrellar contra el suelo, y encima, la justicia arropa al delincuente", comentó Reina.
