Aleksandr Kerzhakov ya es oficialmente jugador del Dinamo de Moscú y se convierte, por tanto, en el quinto futbolista que el Sevilla traspasa a otro club desde el pasado verano. De este modo, la entidad ha visto cómo en pocos meses ingresará por este concepto unos 21 millones de euros.
"Es una operación rentable, ventajosa en el plano económico". Así define Monchi, director deportivo de la entidad, la venta del delantero ruso al Dinamo de Moscú, que pagará por él una cifra superior a los ocho millones de euros que incluso podría incrementarse en función de unas cláusulas referentes a objetivos. El pasado año, el Sevilla pagó por él al Zenit de San Petersburgo unos cinco millones, con lo que el saldo es positivo para la entidad.
El traspaso de Kerzhakov es el quinto que realiza el club de Nervión desde el pasado verano, siendo Aitor Ocio y Kepa quienes inauguraron entonces el capítulo de ventas. David y Gallardo también se marcharon, aunque con la carta de libertad. En el caso del central vitoriano, éste fue traspasado al Athletic por unos tres millones de euros tras haber llegado libre al Sevilla -lo que también supone un desembolso para todo club, en este supuesto para beneficio de los futbolistas- en el año 2003. Por su parte, Kepa, jugador salido de la cantera nervionense, fue fichado por el Getafe a cambio de 3,5 millones.
La venta de futbolistas tuvo continuación tras la apertura del mercado de invierno. El primero en ser traspasado fue Andreas Hinkel, por quien el Celtic Glasgow desembolsó unos tres millones de euros. Viendo que no entraba tampoco en los planes de Jiménez, el lateral alemán, que en su día costó unos cuatro millones, optó por cambiar de aires.
Le siguió Makukula, que se encontraba cedido en el Marítimo portugués. El Sevilla pagó por él en su día unos tres millones, y lo ha traspasado al Benfica de José Antonio Camacho por una cifra que ronda los 3,5 millones. El luso-congoleño, cuyos problemas de rodilla han impedido triunfar en el Sevilla, fue el último jugador en desvincularse de la entidad antes de que ayer lo hiciera oficialmente Kerzhakov.
A todo ello hay que sumar el ahorro que para el club significa no pagar sus salarios, así como los de Martí o Jesuli, jugadores actualmente cedidos y cuyas fichas se pagan entre el Sevilla y los equipos en los que militan.
En resumen: cinco han sido los traspasos realizados desde el pasado verano y la suma que el club se ha embolsado por los mismos se eleva aproximadamente hasta los 21 millones de euros, que no es nada despreciable.
Con vistas a esta temporada 2007/08, el Sevilla se ha gastado algo más de 31 millones, repartidos de la siguiente forma: doce millones por Koné, ocho por Mosquera, cinco por De Mul, y cuatro por Keita, a los que hay que unir los aproximadamente 750.000 euros que cuesta la cesión de Boulahrouz y los 1,5 millones que en principio el club pagará por De Sanctis. Esta última cantidad aún no está cerrada, ya que se está a la espera de conocer la indemnización -la establecerá la FIFA- que el Sevilla deberá pagar al Udinese, y que según las estimaciones rondará los 1,5 millones.