La tercera oleada del Barómetro Andaluz de la Cultura, un informe estadístico bienal realizado por el Instituto de Estudios Sociales de Andalucía (IESA), correspondiente a 2012, arroja un retrato muy desigual de la realidad cultural de la comunidad, con datos esperanzadores, como una mayor valoración del flamenco por parte de la población, y otros preocupantes, como una pérdida de interés hacia las distintas creaciones artísticas por parte de los jóvenes o un inquietante dato: ver la televisión es el principal hábito cultural de los ciudadanos.
El director del IESA, Eduardo Moyano, y el consejero de Cultura, Luciano Alonso, presentaron ayer este estudio, del que se desprenden que para la población andaluza, su patrimonio histórico y sus fiestas tradicionales son lo más representativo de nuestra cultura.
Por sexos, el interés cultural en 2012 está protagonizado de manera destacada por las mujeres. Por grupos de edad, el interés hacia la cultura se manifiesta más claramente a partir de los 45 años. El interés cultural desciende ligeramente entre los menores de 45 años, pasando del 73,6% de 2008 al 67,4% de 2012.
La música, el cine y la lectura son las actividades culturales que concentran mayor interés en la población, y las mujeres de menos de 45 años representan el perfil predominante de esos hábitos. Utilizar archivos históricos, ir a la zarzuela y a la ópera son las actividades de menos interés.
En cuanto a los hábitos culturales practicados, ver la televisión (74,8%), escuchar música (40,3%) o leer (26,4%) son los principales entre semana, mientras que los fines de semana la música y la lectura son sustituidos por hábitos de carácter familiar y social, aunque la televisión sigue siendo el favorito, pero baja al 60%.
Cabe señalar que los hábitos que implican gasto, como ir al cine, teatro o adquirir discos y libros, ha bajado debido a la crisis.
Entre los jóvenes hay una tendencia a valorar más los elementos culturales tradicionales: los andaluces de 18 a 29 años participan en un 33,6% en cofradías, mientras que un 30,7% está en peñas o asociaciones, y un 9,2% en grupos de teatro.
Los ciudadanos perciben que el nivel cultural andaluz es más bajo que en la UE, aunque los resultados de 2012 apuntan hacia un cambio de tendencia. Un 57,2% lo considera el nivel más bajo, un 8,5% lo ve más o menos igual, y un 27,3%, más alto. Mejora con respecto a 2008 y 2010. Al margen, uno de cada dos percibe que el nivel cultural de Andalucía es inferior al de España. No obstante, el porcentaje de quienes piensan lo contrario se ha multiplicado por dos en los últimos cuatro años, pasando del 15 al 30%.
Es llamativo también que el porcentaje de población que opina que se debería pagar parte del coste de la cultura aumenta en 16 puntos desde 2008, pasando del 34% al 50%, mientras que quienes piensan que debe ser gratuita retrocede en 18 puntos, del 62 al 44%. El consejero se apoyó en este dato para defender un cambio de modelo en las ayudas al sector privado, para lo que se aprobará esta legislatura una ley de mecenazgo autonómica.
Los andaluces perciben que la oferta cultural de su localidad está empeorando debido a la crisis (56%) frente a un 37% que la ve igual y un 4,6 que cree mejor.
Alonso destacó también que la oferta en Andalucía aparece por primera vez ligeramente mejor valorada que la de nacional.
Para el consejero el resultado del barómetro no es "ni mejor ni peor, sólo un baño de realidad" y añadió que habrá que comprobar si sus conclusiones se sostienen en el tiempo o son sólo coyunturales y debidas a la crisis.
