Hace ya casi cuatro años que la antigua Hytasa vendió parte de sus terrenos a Solurban, empresa que a su vez los revendió a una filial de Comarex, Inmobiliaria Vegas de Guadaíra. Desde entonces, el proyecto para construir pisos, oficinas y zonas verdes detrás del centro comercial Alcampo estaba paralizado y los mapas urbanísticos ni siquiera estaban actualizados. Ayer la Gerencia de Urbanismo aprobó el convenio (que lo firmarán la semana próxima todas las partes, según confirmaron fuentes consultadas de la empresa textil) y salió a información pública la reparcelación que, por fin, desbloqueará un ambicioso proyecto que puede transformar una zona urbana históricamente industrial.
La actual Hytasal (en 1998 la empresa textil se transformó en sociedad anónima laboral y los trabajadores se convirtieron en patronos) está afrontando con éxito la competencia desleal de los asiáticos gracias a la venta de más de la mitad de sus suelos, casi 60.000 metros cuadrados. Esta recalificación salvó a la empresa, que conserva más de 40.000 metros cuadrados, y posibilitó su modernización. Necesitó una inversión de 12 millones de euros para renovar su maquinaria y sus instalaciones en El Cerro.
La transformación proyectada de los suelos junto a Hytasal es espectacular, si bien habrá que ver si la crisis económica frena o no los objetivos marcados. En las actuales naves y solares abandonados se pretendían construir un total de 400 viviendas, de las que más del 30% tendrán algún tipo de protección oficial.
Los propietarios del terreno diseñaron un proyecto con cuatro torres de unas 20 plantas para estas 400 viviendas, así como otro edificio alto para oficinas. Además, la zona tendría áreas verdes y una calle que unirá el barrio de El Cerro con el Polígono Sur. Éste es uno de los proyectos previstos para acabar con el aislamiento de una zona degradada social y urbanísticamente.
El nuevo PGOU plantea la mejora de estos dos sectores "inconexos" de la ciudad, la avenida de La Paz y la de Hytasa. El objetivo de la ordenación es liberar suelo mediante la construcción en altura, de manera que los espacios libres generados se conviertan en elementos que den una mejor calidad de vida al tejido urbano. Por eso las zonas verdes y las torres cobran protagonismo en este espacio. Con todo, aunque los trámites urbanísticos avanzan, aún no hay fecha para las obras.
