El principal motivo del despido de un técnico es el deficitario rendimiento de una plantilla. Sin embargo, el relevo no siempre es rentable, un extremo que se cumple en la mayoría de los casos de la Segunda División.
A excepción del Betis, que desde la contratación de Víctor Fernández ha firmado una espectacular escalada en pos de asaltar las plazas de ascenso en las que ahora habita. El aragonés es el mejor de los trece debutantes que se han estrenado en la categoría.
Con 18 puntos de 24 posibles, el ex del Zaragoza sella un promedio de 2,25 puntos por partido, un balance más brillante que el de los otros doce inquilinos que han aterrizado en un banquillo a mitad de temporada.
Aunque está debutando en Segunda, una categoría de perfil inferior a las habituales del curriculum de Víctor Fernández, el momento actual de la carrera del ex zaragocista es excelente.
El aragonés es el único de todos los técnicos que han ejercido de recambio que aún no ha perdido. De continuar en la actual dinámica, el preparador heliopolitano batirá el récord de Pepe Bordalás, entrenador del Elche, el 5 de abril, a domicilio y ante el Villarreal B.
Ese día, y siempre que el Girona y el filial amarillo no hayan podido doblegar al once de La Palmera, enlazará diez jornadas sin caer, una racha que acumuló el propio Bordalás desde su debut, en la jornada 7 ante el Recreativo (3-2), hasta que claudicó en la 17 ante el Celta en Balaídos (2-1).
De un partido a otro transcurrieron 64 días, mientras que desde que Víctor se estrenó en Córdoba ante el cuadro califal hasta mañana se habrán agotado 57 páginas del calendario. Por tanto, en Villarreal dinamitaría dos registros: el de los partidos y el de días sin perder.
Especialmente significativo es que el entrenador del Betis sea ya el cuarto de todos los relevos que más partidos ha ganado. Ha resultado vencedor en más ocasiones que sus homólogos del Recreativo, Raúl Agné (15 partidos, 3 triunfos), del Cádiz, Víctor Espárrago (10 encuentros, 2 victorias), del Albacete, el ya destituido Julián Rubio (14 choques, 2 triunfos), o el del Castellón, Tintín Márquez (21 semanas, 4 victorias).
Precisamente, para que el aragonés sea el mejor recambio en todas las facetas deberá derrotar a Narcís Juliá, su segundo entrenador en las filas del Zaragoza y el cuarto relevo de Segunda más eficaz gracias a sus números en el Girona, y a Paco Herrera, que en el Villarreal B ha conseguido firmar un promedio de 1,7 puntos por partido, el segundo mejor tras el del propio Víctor Fernández, que ya ha conseguido certificar su inicio más productivo en un equipo desde que se enroló en el fútbol profesional en 1990.
Por otra parte, el de Zaragoza ya mejora la posición que heredó de su antecesor, algo que sólo han logrado Espárrago en el Cádiz, Pepe Bordalás en el Elche, Juliá en el Girona y el gaditano José González en el Murcia.
