El secretario general del PSOE sevillano, José Antonio Viera, confió en que Monteseirín agote su mandato, hasta 2011, "salvo circunstancia excepcional". De entrada avaló a su oponente, pero de salida criticó a su hombre fuerte, Celis, que debe dejar la portavocía, dijo, porque ya acumula demasiadas tareas.
Año y medio después de las elecciones municipales, el debate sobre la candidatura del PSOE a la Alcaldía de la capital vuelve a abrirse, si es que alguna vez se zanjó. Ayer, el secretario general de los socialistas sevillanos, José Antonio Viera, oponente del alcalde, Alfredo Sánchez Monteseirín, dejó claro que no tiene intención de presentarse al cargo. "No aspiro ni aspiraré en el futuro a ocupar esa posición", resumió, contundente.
A renglón seguido, se mostró confiado en que el actual regidor concluya su mandato sin incidencias, en 2011, que es el tiempo para que el ha sido elegido "democráticamente". Pero añadió la puntilla: agotará el mandato siempre y cuando no surja "una circunstancia excepcional, personal o de otro carácter". Y esa circunstancia, dijo, en política, lo mismo se da "dentro de tres semanas, tres meses, o tres años".
"Ahora es una pérdida de tiempo preocuparse" por la candidatura, dijo, porque sólo hay "una realidad": "que el alcalde se llama Alfredo Sánchez Monteseirín, que gobernamos con IU y que queremos seguir haciéndolo". Es un debate, sostuvo, que no interesa a los ciudadanos.
No quiso Viera valorar los nombres de otros posibles candidatos socialistas a la Alcaldía, de fuera de la casa o de dentro, como el de Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, actual delegado de Presidencia y de Urbanismo y mano derecha del alcalde. Pero sí que volvió a insistir en la necesidad de que Celis sea relevado en la portavocía del grupo socialista en la Casa Grande. Lleva demasiadas materias, vino a decir, y hay que buscar "tiempo para esta dedicación". "Llevar Presidencia y Urbanismo es una tarea muy importante, de enorme enjundia, y ésa es la razón principal por la que entendemos que debe producirse su relevo". No es cuestión de buscar "un perfil" diferentente, sino de buscar el "equilibrio" en la corporación.