La recta final para el congreso del PSOE que se celebrará el próximo sábado ha arrancado marcada por la postura de la dirección regional ante la crisis sevillana: José Antonio Viera y Demetrio Pérez se vieron forzados a abrir las puertas a un acuerdo de última hora como pide Chaves.
Los dos candidatos a la secretaria general del partido tuvieron ayer gestos de apertura y de diálogo, aunque aún no han mantenido conversación alguna. Sus palabras forman parte de una escenificación de diálogo necesaria dados los llamamientos realizados en los últimos días por la dirección regional del partido -primero fue el vicesecretario general, Luis Pizarro, y luego el propio secretario general, Manuel Chaves, quien ayer pidió "un intento con todas las fuerzas"- para que se logre un consenso. Pese a esto, las opciones son reducidas, y así lo admiten los responsables de las dos corrientes.
Demetrio Pérez, de hecho, compareció ayer ante los medios de comunicación con el objetivo de disipar las dudas surgidas sobre sus posibilidades de recabar el 25% de los avales necesarios para formalizar la presentación de su candidatura el próximo sábado. Para ello, llevó una carpeta con 110 firmas. "Aunque han sufrido alguna merma siguen siendo suficientes para pesentarse", apuntó el aspirante a la dirección impulsado desde el sector crítico, quien admitió que en los últimos días ha sufrido un "goteo de ebajas": "Me pasa a mí, y seguramente también al otro candidato. En política, 24 horas es un mundo". Pérez mostró su disposición a dialogar y a abrir un debate "no de personas, sino de ideas y proyectos".
Viera difundió su respuesta a la petición de consenso impulsada desde la dirección regional del partido en declaraciones realizadas a Radio Sevilla: "El que quiera que se una a mi propuesta. Pero que quede claro que no voy a renunciar a ser secretario general. Voy a ser cabeza de lista", apuntó el candidato a la reelección, quien ha expresado en repetidas ocasiones su rechazo a "pagar peajes" o a realizar "listas de integración" con los críticos.
Los dos candidatos admitieron que aún no han mantenido contactos para lograr un acuerdo. Sólo se produjo un acercamiento en la designación de los delegados para los congresos federal y regional, un proceso al que los dos aspirantes a la secretaría general del partido no quisieron trasladar sus diferencias en Sevilla. Al margen de este consenso han sido numerosos los enfrentamientos públicos protagonizados en los últimos días por los dos candidatos.
Demetrio Pérez llegó a acusar a José Antonio Viera de dificultar su candidatura al no permitirle el acceso al censo oficial de delegados para el próximo congreso y no dotar a su alternativa de los recursos necesarios para llevar a cabo su campaña. Viera, quien negó esta acusación ha defendido en varias ocasiones, que el proceso que se celebrará el próximo sábado "no son unas primarias", y que, por tanto, cada corriente debe buscar sus recursos.
La pasada semana, el debate, de un carácter más orgánico, lo protagonizaron José Antonio Viera y Alfonso Rodríguez Gómez de Celis -uno de los referentes del sector crítico y secretario de la Agrupación San Pablo-. Éste reclamó la constitución de la ejecutiva local en Sevilla que permite la ponencia federal del PSOE y que cuestiona la ejecutiva provincial.
