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Villa y Silva, el dúo dinámico de un Valencia con sed

Sumido en una crisis institucional sin precedentes, el Valencia de Unai Emery se ha conjurado para sellar su pasaporte hacia la Champions League, una competición en la que, con el entrenador argentino Héctor Cúper en el banquillo, alcanzó dos finales de forma consecutiva.

el 16 sep 2009 / 01:32 h.

Sumido en una crisis institucional sin precedentes, el Valencia de Unai Emery se ha conjurado para sellar su pasaporte hacia la Champions League, una competición en la que, con el entrenador argentino Héctor Cúper en el banquillo, alcanzó dos finales de forma consecutiva.

El Valencia de Héctor Cúper, que fue capaz de disputar dos finales de la Champions League de forma consecutiva, recrea el pasado más brillante de una entidad sumida en una crisis económica grave y que busca su viabilidad futura en el plano deportivo con un técnico de curriculum espectacular, Unai Emery, y dos cracks en nómina, el asturiano David Villa y el canario David Silva. La cuarta plaza, una opción posible, es el propósito de un plantel que ha sabido renacer de las cenizas tras su desplome clasificatorio.

Emery, el artífice del ascenso a Primera del Almería, ha contribuido a la escalada de sus pupilos con un sistema táctico atrevido -4-2-3-1- y una regeneración en el plano psicológico. En la meta, y pese a la titularidad en el inicio de Liga de Renan, el cacereño César, ex del Tottenham, ha asumido el protagonismo. Guaita sólo participó en la UEFA y la Copa. En la línea de zagueros, el técnico vasco apenas ha variado su esquema, aunque las últimas ausencias han generado un mapa anómalo en la retaguardia. Albiol, central natural y con una soberbia jerarquía, figura en el lateral diestro, mientras que Moretti y Alexis alternan en el siniestro.

Marchena es el indiscutible líder de la cobertura, en la que Maduro se ha consolidado debido a la readaptación de Albiol. El central de Las Cabezas de San Juan se ha erigido en uno de los pilares defensivos de un bloque que dispone de un doble pivote que dota de equilibrio e ingenio a las transiciones. Albelda y Baraja son los ases, y el joven Pablo Hernández la opción secundaria. El castellonense ha ganado relevancia con el tiempo y gracias a la veteranía de los distribuidores de juego, que en ocasiones han cedido el testigo al canterano Míchel.

Fruto de su pizarra, en la que nacen tres mediapuntas, Emery dispone de Mata, Silva y Joaquín en la creación. Albelda y Vicente son otras de las opciones para una zona en la que el ex verdiblanco Joaquín ha ido asumiendo los galones con el transcurso de la Liga. El veloz interior portuense computa 2.612 minutos oficiales.

EL CRACK. Sin embargo, el alma máter del Valencia es un ariete asturiano con instinto asesino y dotes indudables de cazador de área, David Villa. Autor de 22 goles en Liga, el de Tuilla es el referente de un bloque que busca reconquistar el respeto en Europa.

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