Ocho alcaldes de la Axarquía malagueña, uno de los focos más importantes del urbanismo ilegal, aceptaron ayer la oferta de la Junta para la elaboración de sus planes generales, en un proceso en el que colaborarán con la administración autonómica. Los ocho regidores se reunieron con el consejero de Vivienda y Ordenación del Territorio, Juan Espadas, para agilizar la ordenación territorial de estas localidades ante la necesidad de que dispongan de planeamientos urbanísticos y para dar solución a las miles de viviendas construidas en suelo no urbanizable.
A ese primer encuentro acudieron los alcaldes de Alfarnate, Arenas, Canillas de Aceituno, Iznate, Macharaviaya, Moclinejo, Salares y Sedella, abordando de forma individualizada cada caso. La cita contó también con la presencia, entre otros, del presidente de la Diputación, Salvador Pendón, y la delegada provincial del Gobierno andaluz, María Gámez.
En las dos reuniones mantenidas ayer -cada una con cuatro municipios- se puso de manifiesto el estado actual de la tramitación concreta de cada planeamiento y se marcó una hoja de ruta individual para cada uno de ellos, a fin de acortar el tiempo de los procedimientos pendientes, de manera que todos los pueblos dispongan de planeamiento vigente antes de las próximas elecciones locales de 2011.
Tanto los responsables de la consejería como de la Diputación de Málaga, de la Junta y los alcaldes calificaron como "muy positiva" esta reunión, según indicaron desde el ente supramunicipal a través de un comunicado.
La delegada del Gobierno andaluz en Málaga explicó a Europa Press que el encuentro era "un paso inexcusable para dar normalidad" urbanística a los municipios axárquicos. El próximo 28 de enero está prevista la cita con los regidores de Almáchar, Archez, Benamargosa, Canillas de Albaida, Comares, Cómpeta, Cútar y El Borge.
