e. garcía / i. carretero Sevilla
-¿Se ve con posibilidades de sentarse en el Congreso?
-Es posible. Hay dificultades, ya que hacen falta cinco mil votos para esto. Si los sevillanos quieren que haya un diputado de IU en el Congreso que luche por los trabajadores, por la gente que está en precario, por los jóvenes, por la mejora de la sanidad y de la educación, que sepan que hace falta una ayuda, un empujoncito a nuestra coalición para estar en Madrid. Sevilla tuvo siempre diputado y lo perdió por la coyuntura del voto masivo hacia el bipartidismo.
-¿IU no ha logrado vacunarse en estos cuatro años del peligro del voto útil?
-La trampa del voto útil siempre va a existir. Y es una trampa para los sectores más desfavorecidos. El mensaje nuestro es claro: ¿quién va a defender mejor a los jóvenes de la precariedad laboral y de una situación económica difícil? ¿IU o quienes han creado la crisis y han dado alas a la especulación? Para mí, sería útil el voto dependiendo de cómo esté cada uno porque votar al PSOE al final puede ser útil para la banca, pero no para quienes tienen que pagan su hipoteca.
-¿Entonces no ve con muy buenos ojos una alianza de la izquierda?
-IU es una fuerza útil para que haya políticas que beneficien a sectores desfavorecidos. Queremos ser útiles para los trabajadores y para el respeto al medio ambiente no para pensando en participar en el gobierno, sino para conseguir otras políticas. Y para ésos sí podemos ser determinantes.
-¿Un acercamiento al PSOE abriría ampollas en IU?
-Ése será un debate que habrá que tener después de las elecciones. Pero no creemos en el abrazo del oso. IU tiene una identidad propia y no puede dejarse llevar porque nuestras condiciones son muy serias: tenemos que pensar en esos sectores sociales que le comentaba. Una Izquierda Unida fuerte en el Parlamento y en el Congreso es una garantía de que se va a defender las políticas de izquierdas. Porque con el PSOE el Banco de Santander gana 9.000 millones mientras que se le da a la gente 400 euros. Por cierto, en la misma línea que Bush, que va a devolver 800. No estamos de acuerdo con esas políticas neoliberales porque tenemos otra filosofía y un programa propio.
-Hay puntos en los que sus mensajes coinciden. Por ejemplo, en la crítica al discurso del PP sobre inmigración. ¿Le preocupa que ese mensaje cale?
-No estoy de acuerdo con lo que dice el PP. Los inmigrantes están aquí porque, en su gran mayoría, hacen falta. No han venido porque los haya traído IU sino por la demanda de los empresarios. Lo peor del PP no es lo que dice, sino lo que está sembrando. No se puede hacer eso sólo por votos.
-Usted fue rival de Gaspar Llamazares en la pugna por ser coordinador general de IU. ¿Cómo le ve ahora?
-Yo formo parte, actualmente, del equipo de Llamazares como miembro de la Permanente Federal de IU. Me propuso incorporarme a la dirección y lo hice para conseguir el mayor grado de unidad posible. Gaspar es una persona con la que se puede trabajar aunque tengamos matices diferentes en algunas cuestiones. En la última Asamblea Federal encabecé una lista alternativa pero, cuando se eligió la dirección, nos convocó a las otras candidaturas y las dos asumimos formar parte de la dirección de IU. Y sin ningún problema.
-¿La crisis interna de IU les pasará factura?
-A esos temas internos no respondo. Me gustaría que el trocito que dedican a hablar de nuestros temas internos los dedicasen a intentar reflexionar sobre la atención a los dependientes, por ejemplo. Lo otro no importa.
-¿Comparte la impresión de Sánchez Gordillo de que en Andalucía se revalidará la mayoría absoluta?
-El PSOE va a tener un desgaste mayor del que piensa y estoy convencido de que no va a sacar la mayoría absoluta.
