Me he puesto delante del teclado del ordenador y al escribir Club Atlético Osasuna me han venido a la memoria entrañables recuerdos. Permítanmelos, antes de hablar del partido del sábado. Debut de Paco Gallego, uno de los más grandes en la historia del Sevilla FC y del fútbol español, marcando al veterano ‘9' de Osasuna Sabino, con sólo 17 años. Aquella media de los rojillos Zoco-Glaría que terminaron como todos los buenos futbolistas que tienen los pequeños en los grandes de Madrid. A Zariquiegui, el árbitro navarro internacional que más veces pitó al Sevilla. 43 partidos. Años después, haciendo como delegado de campo junto a Juan Arza, el futbolista más importante de la historia del Sevilla FC, navarro de Estella. Los duelos Caparrós-Aguirre, sin olvidarnos de los de Ciganda. Y como no, aquella semifinal con los navarros que dio opción a ganar la segunda UEFA en Glasgow.
Autoestima. En la vida los estados de ánimo son fundamentales. En cualquier orden y actividad. En el fútbol mucho más, por las ilusiones que despierta en los sentimientos de los aficionados y no digamos por lo que se juegan los que lo dirigen y sus intervinientes en el campo. El Sevilla estaba necesitado de una victoria para su autoestima y para que sus aficionados volvieran a confiar en el equipo. El 2-0 ante Osasuna es vital para este Sevilla necesitado de puntos y, muy especialmente, de confianza. Lo demás entra dentro del juego.
Las paradas de Palop, el gol y el trabajo de Medel, el cariño y confianza que tiene la afición en Reyes y no digamos el resurgir de Jesús Navas que sabe que está a tiempo de conseguir su objetivo de la Eurocopa y que su aportación a este equipo puede ser decisiva. No olvido los 200 partidos de Kanouté que tanto y tan bueno ha dado al Sevilla y a su historia.
Dos citas clave. Lo que venga después, vendrá. El tiempo dirá de lo que es capaz este equipo y su ilusionado nuevo entrenador, Míchel. De momento una victoria, repito que muy necesaria para la confianza del equipo y la ilusión del aficionado. Esperan dos partidos que sí pueden marcar el camino de los objetivos del club: Valencia y Atlético de Madrid. Cuando pasen y conozcamos los resultados y el juego del equipo sabremos con conocimiento de causa dónde pueden estar los verdaderos objetivos del Sevilla FC de Michel. De momento ilusión, que ya es algo.
