Tres días, y el semáforo sigue apagado. Desde el pasado miércoles, el cruce entre la avenida de Hytasa y la calle Galicia ha experimentado muchos cambios. Un ramo de flores recuerda a Chelo González Gutiérrez, la funcionaria que murió aplastada por un tráiler cuando cruzaba un paso de cebra, los vecinos se concentran periódicamente para protestar por la falta de señalización y la peligrosidad de las vías y pocos pueden cruzar el paso de peatones sin recordar que el punto de riesgo había sido denunciado con anterioridad a la Delegación de Movilidad.
Sin embargo, hay algunos elementos comunes entre la escena de hace sólo unos días y la que mostró ayer el PP en una imagen remitida a los medios de comunicación: el semáforo sigue sin funcionar y no hay control policial.
Esta carencia se produce pese al compromiso adquirido públicamente por el alcalde. Alfredo Sánchez Monteseirín leyó el pasado jueves un comunicado en el que prometía que encendería la señal y que se establecerían medidas para controlar el tráfico debido a las obras del carril-bici.
Su contundente afirmación contrastaba con el argumento concedido unas horas después del siniestro por el equipo de Gobierno: la señal no se podía encender por dificultades técnicas.
"A día de hoy, no se ha tomado ninguna medida para la regulación semafórica y policial de la avenida de Hytasa. Francisco Fernández -delegado de Movilidad- está demostrando que está muy preocupado por los intereses de su partido, pero alejado de las preocupaciones de los vecinos. Ha tenido la desfachatez de quitarse de en medio sin dar ningún tipo de explicación", criticó el concejal del PP Juan Bueno, en unas declaraciones realizadas a Europa Press.
