Seguro que les suena su cara. Protagonizó el vídeo de campaña del PP en las pasadas elecciones municipales y tomó café con Zoido el día después del 22M. Es Juan Gallardo Marín (Sevilla, 1969), gerente de un supermercado en Su Eminencia. El mismo que recomendaba a Loly votar al PP. Un año después, este representante de la asociación vecinal Entrelindes reconoce que ha llegado la hora de hacer realidad las promesas electorales.
-¿Volvería a quedar con Zoido para tomar café?
-Por supuesto, con el alcalde siempre. Lo que pasa es que le ha tocado bailar con la más fea. Le ha tocado gobernar en el momento más crítico. De hecho, ya me he tomado más de un café con Juan Ignacio Zoido. Pienso que será un buen gestor.
-En estos encuentros, ¿se ha atrevido a darle algún consejo?
-Sí, que veo que le están haciendo acaparar demasiado. Antes estaba en la federación de municipios, ahora presidente del PP-A... Si dentro de cuatro años se presentara a la Junta de Andalucía, ganaríamos un gran presidente andaluz pero la ciudad perdería un gran alcalde que a la larga se demostrará. Espero y deseo que no se vaya a la Junta.
-¿Por qué apostó por Zoido?
-Porque tenía que haber un cambio ante la barbaridad que estaba haciendo el anterior distrito: invertía donde quería y hacía lo que le daba la gana. El anterior gobierno [PSOE-IU] nos tenía olvidados. Eso sí, si en estos cuatro años no hiciera las cosas medianamente bien, no dudes que si tengo que hacer un grupo independiente lo haría por tal de seguir luchando por Su Eminencia. Sólo entraría en política en un grupo independiente de vecinos.
-¿Cómo valora su primer año en el Gobierno municipal?
-Lo que se ha hecho es coordinar todo lo que antes estaba sin conexión para que por lo menos los servicios básicos funcionen.
-La verdad es que no ha habido muchos cambios en estos doce meses en Su Eminencia...
-Sí, han sido pocos, pero como en el resto de Sevilla. Eso sí, ha cambiado mucho el tema de la limpieza, que ahora hay más. Lipasam antes no venía, y ahora lo hace dos y tres veces a la semana. Además hay una mayor frecuencia de paso de los autobuses de Tussam. Esos son cosas básicas que había que cuadrar sin invertir ni un euro.
-¿Satisfecho pues con la gestión del PP?
-Satisfecho, satisfecho... no, sino expectante de lo que van a hacer. Ya es hora de pasar a los hechos en Su Eminencia y olvidarnos de palabras. Así se lo hemos transmitido al grupo municipal y al delegado del distrito. Ya no nos vale el argumento de la crisis. Con la crisis también se pueden hacer cosas. No obras faraónicas, pero sí obras sociales y cosas puntuales que se noten en el día a día, como ayudar a los más necesitados porque Cáritas no da abasto.
-Si no llegaran esos hechos, ¿barajaréis movilizaciones?
-No, no... eso son palabras mayores. Eso hay que consensuarlo con las demás asociaciones. No soy yo quien debe decirlo.
-¿Qué promesas ha cumplido Zoido en Su Eminencia?
-De momento la limpieza y mejorar los servicios de Tussam. También prometió que la línea 26 no iba a morir en San Bernardo sino que seguiría has¬ta el Pra¬do. Otra propuesta era acondicionar el Parque de la Plata y los jardines de la calle Algaba, que antes que acabe el año van a contar con juegos infantiles y aparatos para los mayores. También estamos pendientes del parque de la Música, que hay una disputa entre Junta y Ayuntamiento por la recepción donde los perjudicados son los ciudadanos. Zoido prometió además una carpa para los chavales de la banda de música, que ensayan a la intemperie y que espero que esté antes de las primeras aguas. No podemos pedirle a este alcalde lo que otros no han hecho en tantos años.
-¿Cuáles son las principales carencias del barrio?
-Las zonas verdes que no existen, y ahora que hay las tienen dejadas por una pelea entre administraciones. Y, sobre todo, el tema del tráfico: la carretera de Su Eminencia no puede seguir así, sobre todo, el tramo de Ingeniero La Cierva donde desde hace muchos años hay un mercado ambulante alegal y no ilegal, porque no hay ningún sitio que gestione eso. Es una de las promesas de Zoido.
-¿Cómo afecta la venta ilegal ambulante al barrio?
-Sobre todo al tráfico. Los vendedores aparcan impunemente en doble y triple fila. En un recorrido de 400 metros que tiene la calle Ingeniero de la Cierva el autobús tarda entre 15 y 20 minutos. Luego las aceras están totalmente ocupadas por los más de cien puestos, dejando apenas un metro para el tránsito de los peatones. No pueden pasar los carritos de los niños ni las personas con discapacidad... Por último, está la imagen que dejan cuando se marchan: la zona es una estercolera, una porquería, sin que nadie venga detrás limpiando.
-¿Qué proponéis para erradicar este problema?
-La solución a los puestecitos o el mercadillo, como se conoce a esta venta ambulante, es regularlo y no exterminarlo. Hay explanadas grandes en el barrio, como la de al lado del centro de salud, donde se pueden ubicar estos puestos de venta ambulante unos dos o tres días a la semana. Está claro que con la que está cayendo, no puedes erradicar eso porque hay muchas familias que viven de eso. Pero también es cierto que hay otras miles de personas que pagan sus impuestos y es injusto que alguien se ponga en la puerta de tu negocio con los mismos géneros mu¬cho más baratos por no pagar impuestos. Proponemos un mercadillo regulado. El distrito lo sabe, pero existe un vacío legal.
-En estas semanas han muerto dos jóvenes apuñalados, ¿hay problemas de seguridad?
-Han sido dos sucesos muy trágicos, pero aún así Su Eminencia es un barrio tranquilo, donde la comunión entre inmigrantes y ciudadanos españoles es perfecta. Eso puede pa-sar en cualquier barrio. Basta recordar el doble atropello del Paseo Colón por una persona conocida o el de Tablada. No se puede juzgar un barrio entero por unos hechos aislados, y más cuando tratamos de dignificarlo. Su Eminencia nada tiene que ver con la imagen de los años 80. Ya sólo quedan sitios puntuales de menudeo, algo común en otros lugares de la ciudad.