El Gobierno ha vuelto a dar marcha atrás por segunda vez en su intento de cerrar sin orden judicial las páginas de internet que permiten la descarga de archivos protegidos. El segundo paso atrás lo dio ayer.
La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, había anunciado que su departamento podría bloquear las web pero durante la tarde de ayer el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, la desmintió. Aseguró que "no se va a cerrar nada" en internet, "ninguna página web, ni ningún blog" y anunció que si existe alguna duda, se aclarará en el proyecto de Ley de Economía Sostenible que prevé la protección de la propiedad intelectual, que advirtió, sí debe ser compatible con la protección de la propiedad y de la creación intelectuales.
Con estas declaraciones, Rodríguez Zapatero quiso rebajar la tensión existente entre el Gobierno y la comunidad de internautas y blogueros. El reflejo más claro de esta tensión se vio ayer después de la reunión que mantuvo este grupo con la propia González-Sinde. Tras la misma, reconocieron que salieron "decepcionados y más preocupados que antes" dado que no alcanzaron un acuerdo. El anteproyecto de Ley de Economía Sostenible del Gobierno -norma que permitirá el supuesto cierre de las páginas- ha excitado un movimiento de resistencia en la red, materializado en un manifiesto que ya han suscrito miles de internautas y blogueros, un "revuelo" que a la ministra, según manifestó ayer en el Senado, le parece "positivo" porque, dice "demuestra lo viva que está".
Tras la reunión de ayer por la mañana, González-Sinde, destacó que su departamento sigue abierto a "mejorar" y "escuchar" todas las opiniones, que habrá más citas porque "hay mucho que aprender, hablar y debatir", y que la ley "tiene muy claro" que protege y garantiza derechos fundamentales "como el de libertad de expresión". Así, incidió en que la nueva norma sólo pretende afrontar "el problema de la oferta ilegal" y no el uso que puedan hacer los ciudadanos de internet y que todos coinciden en "que hay que abordar una nueva manera de trabajar" en la red, aunque todavía no se haya encontrado "la solución perfecta".
Uno de los asistentes a la reunión, el ex director del diario Público y autor del blog Escolar.net, Ignacio Escolar, aseguró tras la cita que salía de la misma "más preocupado de lo que venía". A su juicio, las nuevas medidas permitirán el cierre de páginas albergadas no sólo en servidores de España, sino en otros países, de forma que el internet que "veríamos" en España no sería "el mismo que en Francia o Estados Unidos", algo "peligrosísimo" y que se hace en países como China o Cuba, "no en los democráticos". "No se puede vulnerar un derecho básico sin el derecho a un juicio, ni convertir en administrativo algo tan serio como cerrar una página web".
A otro de los asistentes, Enrique Dans, profesor de Tecnología del Instituto de Empresa, opinó que la norma es "antidemocrática y equivalente a la Ley Corcuera", y que la Comisión es una suerte de "policía de internet" que releva a los jueces a un papel secundario. Mientras, el responsable de Comunicación del PP, Esteban González Pons, coincidió en que la medida le parece propia del régimen comunista chino.
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