Octubre suele ser un mes malo en el empleo, pero el de 2011 ha sido rematadamente malo y el peor en los últimos tres años de crisis económica. Por un lado, la destrucción de puestos de trabajo continúa, puesto que no sólo sube el paro, sino que también se reducen los afiliados a la Seguridad Social. Por el otro, uno de los principales objetivos de la reforma laboral, empujar la contratación indefinida, es un fracaso, ya que ésta disminuye.
Son los últimos datos antes de las elecciones generales del próximo día 20 y los que harán, pues, que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se despida batiendo récords de personas sin trabajo registradas en España: 4.360.926 (si se escoge la estadística de la EPA, serían 5 millones).
Las cifras de los Servicios Públicos de Empleo -antiguo Inem- correspondientes a octubre se publicaron ayer y fueron peores de lo esperado, hasta el punto de que el Ejecutivo no tuvo más remedio que reconocer que revelan que la economía española se enfrenta a una "recaída", "retrocede al inicio de la crisis" y, por ende, la salida del túnel está "más lejos".
Son palabras del ministro de Trabajo, Valeriano Gómez, quien ayer no delegó la presentación de los datos. Lo hizo personalmente para asumir "la responsabilidad de todos y cada y uno de los desempleados de España", como ya hiciera días atrás Zapatero.
Vayamos a los números. Octubre se saldó con 134.182 parados más que en septiembre (un 3,17% de aumento) y por encima del cuarto de millón (274.950) respecto al mismo mes de 2010. El cómputo para el conjunto del país se coloca en 4.360.926. Todos los sectores se sumaron a la sangría, pero la incidencia de los servicios fue especialmente alta: 85.434. En ella confluyen dos circunstancias: octubre supone finiquitar la temporada turística veraniega y, además, se constata el recorte del empleo público debido a los ajustes emprendidos por las distintas administraciones.
Gómez, de hecho, hizo hincapié en este último argumento, al detallar que el desempleo creció sobre todo en servicios sociales (el 633%) y sanidad (47%) y apuntar sobre todo a las comunidades autónomas y ayuntamientos, en especial a las primeras -y dentro de éstas, a las del PP-. Una tijera laboral que, dijo, es una "novedad", que se añade al deterioro en sí de la economía.
Se rubricaron en el mes de octubre 1.294.801 contratos, el 7,1% por debajo del anterior y el 3,81% menos en términos interanuales. De éstos, 97.265 fueron indefinidos, un 7,12% y 17,87% menos, respectivamente. La reforma laboral, pues, ni ha creado empleo ni tampoco rebajado la temporalidad en el trabajo. La patronal CEOE reiteró su ya sempiterna petición: reformas estructurales profundas y "no reformitas" que traigan, dijo, autopistas de facilidades.
Por tercer mes consecutivo se redujo, además, el número de afiliados a la Seguridad Social. El sistema perdió 75.249 cotizantes (un 0,4%), hasta 17.360.313 ocupados. Y la comparación con octubre del año pasado es aún más palpable: entonces hubo sólo 5.331 menos.
Andalucía. 31.068 parados sumó la comunidad, un 3,29% más respecto a septiembre, hasta 974.162 personas. En un año entero, son 61.345 los andaluces que han pasado a formar parte del listado del Servicio Andaluz de Empleo. A excepción de Almería, el paro se incrementó en todas las provincias sobre septiembre, con Jaén, Granada y Málaga liderando la aportación.
Desde el Gobierno regional se esforzaron en achacar el aumento a las turbulencias económicas internacionales. Llamativa la declaración de la consejera Carmen Martínez Aguayo, quien dijo que el desempleo crece en Andalucía como también lo hace en el conjunto del Estado y en "el mundo entero".
307.027 contratos se firmaron en la comunidad en octubre, siendo un 1,75% menos que en el mes anterior, y un 1,19% en tasa interanual. Y de éstos, sólo 11.113 fueron indefinidos, con bajadas respectivas del 11,49% y 18,78%, porcentajes superiores a la media nacional.
La afiliación a la Seguridad Social se mantuvo prácticamente estable, al recortarse sólo ocho centésimas y quedar la cifra total de cotizantes en 2.832.183.
Sevilla, la provincia con más aumento interanual
224.684 eran a finales de octubre los parados inscritos en las oficinas del SAE en Sevilla, un 3,21% más respecto a septiembre y el 9,41% más en comparación interanual. Aunque en la variación mensual no es precisamente la provincia andaluza donde más aumenta el desempleo, el 9,41% -este porcentaje equivale a 19.318 personas-, sí lo es respecto a octubre de 2010. De hecho, está entre las quince españolas con mayor incremento interanual. Servicios y construcción fueron, por este orden, los que más sufrieron la sangría laboral, aunque todos sumaron.
En cuanto a los contratos, en Sevilla se rubricaron 78.338 en octubre, con caída mensual del 8,47% y del 2,42% interanual. De ellos, sólo 2.809 (3,5 de cada cien) fueron indefinidos, un 13,25% por debajo de los firmados en septiembre y un 16,05% menos con respecto a octubre de 2010. El único dato positivo viene de la mano de los afiliados a la Seguridad Social. La cifra total se situó en 694.387, el 0,45% mensual más.
