El PNV ha vuelto a convertirse en el clavo ardiendo al que tendrá que agarrarse el Gobierno para que los Presupuestos de 2009 lleguen a buen puerto. Zapatero se ocupará personalmente de salvar los obstáculos para que los nacionalistas den el sí a las cuentas después de que CiU anunciara ayer que presentará una enmienda a la totalidad.
Finalmente, la conversación entre el portavoz de CiU en el Congreso, Josep Antoni Durán i Lleida, con el portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, no tuvo éxito. Durán i Lleida alegó que el Presupuesto "no ha llegado a tiempo para asumir la actual crisis económica" y ha sido elaborado con perspectivas "irreales" y sin "visos de credibilidad". Salvar el que hasta ahora ha sido el principal escollo para que los grupos catalanes aprobaran las cuentas, la financiación catalana, ya no sería suficiente para dar su apoyo a los presupuestos, aun siendo prioritario para CiU.
Preguntado por si cree que la devolución de los Presupuestos y la consecuente prolongación de los de 2008 es lo mejor que puede pasarle a España en la actual coyuntura económica, Duran i Lleida dijo que lo mejor que puede pasarle al país es que se presenten unos Presupuestos nuevos y esto "es responsabilidad del Gobierno". Desde CiU creen que las cuentas para el año próximo han sido confeccionadas cuando el Ejecutivo pensaba que el impacto de la crisis no existía y en las últimas semanas ya han sido "superadas y destrozadas" por la situación financiera.
En su opinión, el Gobierno ha "desaprovechado la oportunidad" de utilizar los Presupuestos como un "instrumento de concreción contable" para aplicar el plan de acción de relanzamiento de la economía. El portavoz de CiU en el Congreso recordó que la Cámara Alta aprobó en septiembre una moción para que el Ejecutivo presentara un paquete de propuestas contra la crisis para afrontar el nuevo ciclo económico y un análisis de la economía española, documentos que, señaló, no ha presentado. En la anterior tramitación de los presupuestos para el actual ejercicio de 2008, CiU también votó en contra de las cuentas, aunque a pesar de ello finalmente salieron adelante.
Negociaciones. En estas circunstancias, el PNV vuelve a ser la última esperanza. Tanto es así que el propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, se comprometió ayer a mediar en las negociaciones que mantienen los nacionalistas con el PSOE sobre los Presupuestos Generales del Estado para 2009 con el fin de "desbloquear obstáculos insalvables". Así lo aseguró ayer el portavoz del grupo parlamentario PNV, Josu Erkoreka, tras el encuentro que mantuvo con el jefe del Ejecutivo en el Congreso para conocer las últimas medidas financieras anunciadas por el Gobierno. Erkoreka dijo que ha "lanzado un mensaje de alarma" al presidente para que "influya" en las negociaciones que mantiene el PNV con el grupo socialista sobre las transferencias en materia de políticas activas de empleo y de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i), las principales condiciones del PNV para dar su apoyo a las cuentas.
Los votos de los seis diputados del PNV, junto con el posible apoyo de los dos del BNG permitirían al Gobierno salvar los Presupuestos en una primera ronda. Aunque el apoyo de CiU, que tiene diez escaños en el Congreso, hubiera bastado por sí solo. Así las cosas, 170 diputados -sin incluir los dos de UPN, integrados en el Grupo Popular y que podrían decantarse finalmente por la abstención- han asegurado ya su rechazo a las cuentas públicas, frente a los 169 escaños con los que cuenta el PSOE y seis partidos -PP, CiU, ERC, IU, ICV y UPyD- han presentado ya enmiendas a la totalidad del proyecto.
Los decretos. Mientras tanto, los dos decretos ley con medidas de apoyo a la banca aprobados por el Gobierno contarán el próximo lunes con el apoyo suficiente en el Congreso para ser convalidados gracias al visto bueno de al menos cinco partidos, aunque la mayoría de los grupos exigieron ayer en su reunión con Zapatero más garantías sobre su gestión.
Así, los grupos parlamentarios reclamarán al Gobierno en el pleno de la próxima semana la creación de mecanismos específicos de control de estas medidas para garantizar la transparencia fiscal.
