El próximo desembarco de Zara, del grupo Inditex, en el mundo de la venta por internet supone un espaldarazo a una política iniciada por empresas como Mango, y que ha demostrado su viabilidad económica con el auge de empresas de venta de ropa y complementos únicamente on line, como Privalia. El comercio a través de la red se ha colocado en el punto de mira de las compañías de textil, donde ya están presentes con buenos resultados marcas como Armand Bassi, Custo Barcelona o Punto Blanco, mientras que un puñado de grupos empresariales pretenden dar el salto en los próximos meses, coincidiendo con la decisión de Zara de estrenarse en la web el 2 de septiembre.
Ésta no es más que una estrategia para hacerse más grande en el sector, donde la firma que dirige Amancio Ortega se encuentra con marcas que intentan ganarle terreno en su posición de liderazgo, como la japonesa Uniqlo, que triunfa en EEUU.
Además, un estudio de Nielsen anuncia que en el segundo semestre de este año el 36% de los internautas españoles prevé comprar ropa o complementos de moda por internet, por encima del 32% que apunta a que piensa adquirir billetes de avión, si bien los viajes todavía facturarán mucho más que la moda.
La compañía Desigual será una de las marcas en estrenar un canal de venta por internet el próximo septiembre, según confirmó la empresa a Efe, mientras que otras firmas, como Antonio Miró, estudian sumarse a lo largo de 2011.
"Un equipo creativo de 20 personas lleva trabajando más de seis meses en la creación y programación del nuevo canal de venta a través de internet", afirmaron portavoces de Desigual.
También Mango, que inició este servicio en septiembre de 2000 -en una época en la que los beneficios de la web en el sector de la moda eran inciertos- aseguró que la entrega de productos vendidos desde la web debe hacerse paso a paso. En este sentido, Mango inaugurará en breve una estructura logística en Rusia para atender el mercado eslavo, después de haber abierto bases en Europa, EEUU y Turquía.
En 2009 la venta por internet supuso para la compañía una facturación de 11,7 millones, un 47% más con respecto a 2008, equivalente al 1% de la cifra de ventas de Mango. El grupo prevé duplicar esta cifra al cierre de 2010.
