El PP situó al puerto de Sevilla en el centro de sus críticas. Su denuncia se apoya en unos datos del Ministerio de Fomento: Sevilla es el penúltimo puerto en crecimiento de movimientos de mercancías entre 2000 y 2007. El tráfico sólo aumentó un 1,5%, muy por debajo del 110% de Valencia y el 54,6% de Algeciras. Además, en la categoría de mercancía general y graneles, siempre según estos datos, la ciudad ha descendido un 9% mientras que otras capitales como Huelva o Cádiz han subido.
El portavoz popular, Juan Ignacio Zoido, culpó a la Autoridad Portuaria y al alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, como miembro del consejo de administración, de este descenso que atribuyó a tres factores: "En primer lugar, se ha abandonado la gestión del puerto a favor de la gestión urbanística de los terrenos.
En segundo lugar, se ha desatendido el papel del puerto como espacio de exportación e importación de mercancías. En tercer lugar, las instalaciones están en un estado ruinoso, con tinglados vacíos y deteriorados que no pueden ser ni siquiera empleados. Ésa es la primera imagen que tienen los barcos del puerto de Sevilla". La oposición, que difundió una serie de imágenes tomadas el pasado mes de noviembre en el que se pueden apreciar techos y puertas rotas, anunció que presentará una moción en el Pleno de enero para pedir un plan integral.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Manuel Fernández, negó los datos difundidos por la oposición y subrayó que los tinglados y almacenes están en pleno proceso de reformas, unas obras que ya han concluido en varias de las naves: "Es una irresponsabilidad la actitud de Zoido y que quieran meter al puerto en el debate político, sobre todo, cuando él ha sido representante de los poderes del Estado. Le reto a un debate público cuando quiera".
