El alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, afirmó ayer que «de momento» no habrá marcha atrás en la implantación de la zona azul en Bami, así como en otros enclaves como Nervión y Macarena, a los que el pasado día 18 llegó por primera vez este sistema de estacionamiento regulado entre protestas y el rechazo de un grupo de afectados. No obstante, Zoido negó tajantemente que exista oposición a esta medida por parte de los vecinos.
«¿Rechazo vecinal? Yo no he encontrado ese rechazo, no son los informes que tengo sobre la mesa del delegado de Seguridad y por lo tanto no va a haber marcha atrás», respondió el regidor cuando fue cuestionado por esta polémica. Zoido explicó además que «lo que sí he visto es que hay no residentes que no están de acuerdo, pero sí hay vecinos que están encantados». En su planteamiento discernió entre «una parte de los vecinos muy contentos y otras personas que no lo están a las que se está informando de que se podrán incorporar a los bonos para la zona y cuando veamos el efecto que surte la medida ya se verá».
En relación al caso concreto de Bami, donde el Consistorio ha habilitado un total de 1.767 plazas de zona azul, en teoría, para acabar con el conflicto de los gorrillas, el alcalde aseguró también que en este barrio la implantación de la zona azul se ha hecho con «un amplio grado de consenso», saliendo así al paso de las críticas vertidas por el colectivo de vecinos, comerciantes y otros afectados, entre los que se encuentran trabajadores del próximo hospital Virgen del Rocío, que se han constituido en plataforma ciudadana. Éstos protagonizaron la semana pasada una marcha por el barrio para solicitar la paralización de la zona azul al considerar que se ha aprobado siguiendo «un procedimiento irregular» al salir adelante mediante resolución del delegado de Seguridad y no con el visto bueno del Pleno municipal.
En este sentido, la plataforma de afectados de Bami leerá esta mañana un manifiesto junto al hospital Virgen del Rocío en el que expondrá los motivos por los que no es viable la zona azul en este enclave de la ciudad:«No se ha hecho con consenso del barrio y prueba de esta falta de consenso es que las calles están desiertas desde que empezó a funcionar la zona azul ¿Esto es consenso», detallaron desde la plataforma de afectados.
Y es que este colectivo opositor tiene previsto más acciones. Entre ellas, una movilización por el barrio por fecha por determinar y la concentración en Plaza Nueva este viernes durante la celebración del pleno del Ayuntamiento. «No vamos a parar hasta que se sienten a dialogar y busquemos otras opciones a la zona azul», insisten.
Por su parte, IU pedía al Ayuntamiento que «se replantee su intención de imponer la zona azul a toda costa» lo que considera «una importante contestación ciudadana». En este sentido, en el Pleno del viernes incluirá un ruego en el que solicitará que «se paralice la ampliación de la zona azul en Sevilla y se abra un proceso de participación ciudadana con todos los colectivos afectados» al objeto de abordar «la idoneidad o no de esta medida (que incluya la posibilidad de celebrar referéndum en los barrios donde más polémica provoca)». Y prosigue IU «con el fin de acordar los términos en que ésta debe ser implantada, en caso de que hubiese consenso al respecto».
En este sentido, Zoido recriminó a los partidos de la oposición PSOE e IU que ahora se «alarmen» por 3.000 plazas cuando el anterior Gobierno municipal, conformado por estos grupos políticos, tenía programadas 17.000.
La reciente ampliación de la zona azul ha supuesto el incremento de 4.112 a 7.285 plazas y afecta principalmente a enclaves, como Bami (1.726), Macarena (229), Pirotecnia (772) y Luis Montoto (786).
