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Pasajeros evacuados del aeropuerto francés de París-Orly tras el ataque. / Efe
El individuo abatido hoy en el aeropuerto de París-Orly tras arrebatar un arma a una militar juró «morir por Alá», según reveló anoche la Fiscalía de París. El atacante gritó estas palabras mientras apuntaba con una pistola de aire comprimido a la militar, según el testimonio de militares presentes del que dio cuenta el fiscal parisino, François Molins.
«¡Bajad las armas! ¡Poned las manos sobre la cabeza! ¡Estoy aquí para morir por Alá! ¡Seguro que va a haber muertes!», gritó el hombre, identificado por Molins como Zied ben Belgacem. El agresor fue abatido a tiros por los otros soldados. Molins informó además de que hay tres personas detenidas en relación con el incidente y explicó que el objetivo del ataque y la radicalización del sospechoso justifican que se esté tratando como un incidente de terrorismo. El fiscal informó además de que el atacante llevaba una bolsa con una lata de combustible y reveló que Belgacem estaba en libertad condicional.
El ataque terrorista no se cobró más muertes que la de su autor pero sí consiguió el objetivo del miedo: un centenar de vuelos, de los 400 programados para ayer, fueron suspendidos en el aeropuerto parisiense a causa de su cierre provisional después del suceso. Como medida de precaución, las autoridades ordenaron la evacuación de todo el aeropuerto, lo que supuso el desalojo de unas 3.000 personas, y la suspensión de la totalidad del tráfico aéreo en Orly.
El protagonista de esta historia abortada, un ciudadano francés de 39 años, estaba fichado por delitos de delincuencia menor y tráfico de drogas, pero –según la televisión BFMTV– tras una estancia en prisión estaba siendo seguido por los servicios de inteligencia por su presunta radicalización.
Según las autoridades galas, Belgacem conducía su vehículo cuando se encontró con un control de carretera en la localidad de Garge les Gonesse, donde residía. En el momento en el que se comprobaba su identidad, el hombre sacó una pistola de cartuchos y disparó contra una agente, a la que hirió de forma leve, antes de huir. Según BFMTV, el agresor también pudo resultar herido.
Su rastro fue seguido desde esa ciudad del norte de París hasta otra del sur, donde robó otro vehículo y amenazó a los clientes de un bar en Vitry, municipio vecino del aeropuerto. El coche que robó fue hallado en el aparcamiento del aeropuerto. Una vez en el interior, en la terminal Sur, según el ministro francés de Defensa, Jean-Yves Le Drian, que también acudió al lugar de los hechos, el individuo atacó a una patrulla de tres soldados del Ejército del Aire desplegada en Orly dentro del dispositivo antiterrorista puesto en marcha tras la oleada de atentados yihadistas sufridos en el país.
El hombre trató de robar el fusil reglamentario a una soldado, a la que derribó, pero a quien no logró arrebatar el arma. Según testigos presenciales, el individuo apuntó a la cabeza de la militar mientras sus dos compañeros le apuntaban a él. Fueron los dos compañeros de la agente agredida los que abatieron al hombre.