El incendio de Portugal sigue con cuatro frentes abiertos

Las víctimas suben a 64. Un bombero que se encontraba en estado grave es el último fallecido. Un rayo podría ser la causa del fuego

19 jun 2017 / 22:00 h - Actualizado: 20 jun 2017 / 07:55 h.
"Incendios"
  • Un grupo de personal militar llega para ofrecer asistencia en una zona afectada por el fuego. / Paulo Novais (Efe)
    Un grupo de personal militar llega para ofrecer asistencia en una zona afectada por el fuego. / Paulo Novais (Efe)

Más de 2.000 efectivos continuaban este lunes luchando contra el incendio que arrasa el centro de Portugal desde el sábado, dejando a su paso al menos 64 muertos y un paisaje desolador en un país impactado y conmocionado ante la magnitud de la tragedia. El fuego, que arrancó el sábado por la tarde en el municipio de Pedrógão Grande, en el distrito de Leiria, se ha extendido también a los de Castelo Branco y Coimbra, y mantiene todavía cuatro frentes activos. El número de víctimas mortales ha subido a 64 con la muerte este lunes de un bombero que permanecía ingresado en estado muy grave.

Según el último balance oficial ofrecido por la ministra de Administración Interna, Constança Urbano, el incendio deja más de 60 heridos, varios de ellos de gravedad.

Los efectivos terrestres todavía no han conseguido acceder a algunas aldeas cercadas por el fuego y la baja visibilidad ha dificultado el trabajo de los medios aéreos, especialmente en las primeras horas del día, en una zona en la que las temperaturas rondan los 38 grados, con viento de moderado a fuerte. «Es necesario llegar a todo el territorio para ver si hay más víctimas en las pequeñas aldeas», repartidas por la Sierra de Lousã y la cuenca del río Zezere, dijo a Efe Rui Rocha, alcalde de la localidad de Ansião, una de las afectadas por las llamas.

La versión que manejan las autoridades lusas apunta a que el fuego se inició por el impacto de un rayo en un árbol seco en la tarde del sábado, con temperaturas de 40 grados y fuertes vientos que ayudaron a propagar las llamas. A pesar de que los portugueses están acostumbrados a sufrir numerosos incendios cada verano –es el país de la Unión Europea más afectado por las llamas en este siglo–, la magnitud de esta tragedia les mantiene impactados.

Muchos siguen sin entender cómo el fuego pudo expandirse con tanta rapidez, cercando aldeas enteras y una carretera que une los municipios de Figueiró dos Vinhos y Castanheira de Pera, donde treinta personas murieron atrapadas dentro de sus vehículos. El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, apeló desde el centro de operaciones instalado en Avelar, a concentrar todos los esfuerzos en combatir el fuego, en vez de discutir las causas y las posibles responsabilidades.

El Gobierno español ha enviado un dispositivo para apoyar a Portugal a combatir el fuego, en el que destacan seis aviones y 125 profesionales que están siendo coordinados desde una unidad especial de Protección Civil y Emergencias. El ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, recalcó que el España estará «al lado» de Portugal en «cada una de sus necesidades» tras el mortífero incendio.