Lucía Lacarra rinde tributo a su maestro Víctor Ullate

La bailarina llega a Itálica con ‘Danza en cuerpo y alma’

02 jul 2015 / 22:52 h - Actualizado: 02 jul 2015 / 22:58 h.
"Danza"
  • La bailarina Lucía Lacarra, en un momento de su montaje ‘Danza en cuerpo y alma’. / El Correo
    La bailarina Lucía Lacarra, en un momento de su montaje ‘Danza en cuerpo y alma’. / El Correo

Una de las grandes bailarinas españolas de los últimos tiempos, Lucía Lacarra (Zumaya, 1975), regresa este viernes y sábado al Teatro Romano de Itálica para presentar Danza en cuerpo y alma, un espectáculo donde rinde homenaje a su gran maestro, Víctor Ullate.

«Llevaba tiempo queriendo bailar en España después de mucho tiempo en el extranjero, y quería que mi propuesta tuviera un concepto», explica la artista, actualmente en el Ballet de la Ópera de Munich. Ese concepto es el recuerdo a Ullate, que comparte en escena con Joaquín de Luz y Carlos Pinillos. «Llevamos en nuestro cuerpo la enseñanza y la disciplina que nos inculcó Víctor», agrega.

Así, una de las piezas centrales de la obra es original de Víctor Ullate, pero que ninguno de los tres llegó nunca a hacer con él. «Ha sido fantástico volver a ponernos a su disposición. Es un modo de disfrutar y de agradecerle todo lo que hizo con nosotros, porque la base que nos dio ha marcado nuestras carreras», apunta Lacarra.

Danza en cuerpo y alma empieza con tres preludios de Ben Stevenson, «que empiezan con una barra, el inicio de cualquier bailarín. Es una pieza lírica, romántica, sobre una pareja que se encuentra en una clase y se enamora», dice la bailarina. «Como nosotros», añade a su lado Marlon Dino, su esposo, padre de su hija y compañero sobre las tablas.

Luego llega la aportación de Ullate, Sola, que escribió para Trinidad Sevillano. «Tiene una sensibilidad muy especial, es la historia de una mujer que recuerda su pasado. Siempre he tenido ganas de bailarla». Por último, Broken falt, inédita en España, «quiere demostrar mi evolución de los últimos años».

Por su parte, Joaquín de Luz ofrecerá De Triana a Sevilla, mientras que Carlos Pinillos y Filipa de Castro harán una vez más una pieza de Ullate, Fratres.

¿Por qué Ullate, qué tiene de especial, qué ha tenido para tanta gente? «Lo mismo que tuvo en su carrera de bailarín lo ha mantenido: una pasión única por su trabajo», responde Lacarra. «Nos ha hecho darle una importancia extrema a esta profesión, tomar conciencia de que lo que haces, lo haces por ti mismo. Siempre tuvo el ojo para saber ver nuestro potencial, y sabía cómo extraerlo, cómo empujar a los bailarines a superarse. Por mucho que cambies de compañía, esa mentalidad te acompaña: se convierte en tu forma de trabajar, de ver la danza».

«En tres horas, Ullate no te da cinco minutos de pausa», asegura Dino. «Es un trabajo muy intenso, pero al final sientes que has conseguido algo muy especial. Es extraordinario».

No obstante, Lacarra subraya que «la gratitud no es frecuente en la danza, tal vez no lo es en ningún campo. La gente no se para a agradecer la ayuda que ha recibido. Yo siempre he querido ser sincera y honesta y realista agradeciendo de todo corazón».

Eso sin perjuicio de que cualquiera que entra en la danza sabe qué sacrificios exige. «Nuestra carrera es muy corta, si sientes que se te va un año o dos, temes estar perdiendo el tiempo, por eso muchos hemos salido de España», apostilla.