Guía cofrade: Acción de gracias (319)

Esta oración se realiza después de la Eucaristía y sirve para dar gracias a Dios. Es una fórmula muy presente en las hermandades

30 dic 2017 / 22:01 h - Actualizado: 30 dic 2017 / 22:37 h.
"Cofradías","Guía cofrade"
  • La acción de gracias no tiene por qué ser pronunciada por el sacerdote. / El Correo
    La acción de gracias no tiene por qué ser pronunciada por el sacerdote. / El Correo

Aunque pudiera parecer más un concepto litúrgico que cofrade, lo cierto es que la acción de gracias también está muy presente en nuestras hermandades.

La acción de gracias es una oración que se pronuncia, fundamentalmente, después de la eucaristía. Así, nuestras hermandades suelen hacer uso de ella en las celebraciones de sus cultos como, por ejemplo, las funciones en honor a sus titulares.

Este tipo de oración no es estático. Esto es, pueden ser reformuladas e incluso escritas al completo por el diputado de cultos de la corporación en cuestión. No obstante, este siempre debe contar con el asesoramiento de su director espiritual. Normalmente, suele ser pronunciada por un hermano de la corporación que no tiene por qué dedicarse al sacerdocio.

El objetivo último de una acción de gracias es mostrar la gratitud de los fieles por la eucaristía. Así, aunque este modo de agradecimiento deba ir dirigido a Dios, son muchos los que dedican estos textos para dirigirse, directamente, a los titulares de las corporaciones.

Aunque durante un tiempo no fueron muy frecuentes en las celebraciones eucarísticas organizadas por las propias hermandades, lo cierto es que cada vez se escuchan más, lo cual enriquece el trabajo litúrgico de las cofradías de nuestra ciudad.

Para la escritura de una acción de gracias se puede optar por la utilización de cualquier tipo de recurso literario. Es más, hay quien las suele escribir en verso, aunque no es lo más habitual. Es definitiva, una acción de gracias es cualquier texto cuyo fin último sea, como su propio nombre indica, dar las gracias a Dios, pudiéndose optar por la intermediación a través del titular de la hermandad correspondiente.