Cientos de personas han arropado este sábado al Simpecado del Rocío de la Macarena en su vuelta a casa después de haber presidido el Pregón de las Glorias 2019 en la Catedral de Sevilla, a cargo de Manuel Martín Fajardo. Su traslado se ha convertido en el mejor anticipo de la semana de Pentecostés: tiro de bueyes, carreta de plata, tamboriles y sevillanas tomaron las calles del centro de la ciudad.
Sólo faltó echarse a las arenas. Los romeros de la Macarena han adelantado este año su camino. No han tenido que esperar a la semana de Pentecostés para acompañar a su Simpecado, con una imagen de la Blanca Paloma realizada por el imaginero sevillano Fernando Aguado. En plena Pascua de la Resurrección, estos rocieros del Arco han dado ya sus primeras pisadas sobre el adoquinado al paso de la señorial carreta de la hermandad. Ha sido el pistoletazo de salida al nuevo tiempo de las Glorias en Sevilla, que arrancará en unos días con las primeras procesiones letíficas.
El regreso ha dejado imágenes insólitas como su discurrir por la Plaza Nueva, donde ha sido recibida por la Corporación Municipal y su acompañamiento con banda de música hasta la plaza del Salvador. Desde este punto, el Simpecado del Rocío macareno trajo los alegres sonidos de los tamborileros, que en un número superior a treinta, pusieron la nota musical a este triunfal regreso a casa. Petalás, sevillanas, rezos, emociones.... Fueron horas para el recuerdo de sus hermanos y de todo el barrio. Ya queda menos para que sea miércoles de romería... "siempre al Rocío con la Macarena".