Guía cofrade: Cabildo de elecciones (241)

Las cofradías cuentan con foros internos en los que debatir, aprobar o informar de las decisiones de la junta de gobierno sobre la celebración de los cultos, incluida la estación de penitencia o solemne procesión en el caso de las corporaciones de glorias. En el conjunto de normas internas de gestión de una hermandad –también conocidas como Reglas– se reserva un apartado para definir y convocar el proceso de elección de los cargos de la junta de gobierno dentro del cabildo general de elecciones. Se trata de una asamblea de hermanos, habitualmente mayores de 18 años y con cierta antigüedad en la nómina de la cofradía –puede oscilar entre un y dos años–, que se convoca siguiendo unos plazos estipulados en las Reglas y tras haberse presentado, en plazo y forma, las distintas candidaturas de hermanos que aspiran a regir los destinos de la corporación en los próximos años; así como el censo oficial de hermanos con derecho a voto. El día de dicho cabildo, la casa de hermandad se convierte en sede electoral en la que, durante unas horas, los hermanos que cumplen con los requisitos ejercen libremente su derecho al voto, otorgando así su apoyo a una candidatura. En este proceso, puede haber más de una lista pese a las recomendaciones de la Autoridad Eclesiástica de que prevalezca solo una. Una vez concluida la votación, se procede al escrutinio de los votos depositados en la urna y finalmente a la proclamación del nuevo hermano mayor y su junta de gobierno, que deberá ratificar el Arzobispado. Puede pasar que se trate de una renovación, pues el hermano mayor puede optar a una reelección y estar dos mandatos seguidos.