Desmontando ‘La Pasión’

Manuel Alejandro González Cruz es el compositor de una marcha que ha marcado un punto de inflexión en el repertorio de Tres Caídas

21 mar 2019 / 08:00 h - Actualizado: 21 mar 2019 / 08:00 h.
"Cofradías","Esperanza de Triana","Cuaresma","Cuaresma 2019"
  • Manuel Alejandro González Cruz. Kini. / El Correo
    Manuel Alejandro González Cruz. Kini. / El Correo

‘La Pasión’ es sin duda la marcha más importante de la historia reciente de la banda de las Tres Caídas de Triana. Estrenada en Octubre de 2008 en la procesión de Madre de Dios del Rosario marcaría un punto de inflexión importante en el repertorio de la banda trianera y supeditaría el estilo futuro, no sólo de la formación dirigida por Julio Vera sino que dejaría una clara tendencia en muchas de las composiciones que se realizarían a partir de su estreno.

Manuel Alejandro González Cruz (Quini), su compositor, es licenciado en dirección de orquesta por la Royal Schools Music de Londres y estudió dirección de orquesta con los maestros Juan Luis Pérez y Francisco Navarro Lara, con quien cursó estudios en la escuela internacional de dirección de orquesta y banda especializándose en armonía, contrapunto, composición y piano, con el compositor y pianista chileno Juan Marín.

Sin embargo en el momento que hizo la marcha que nos ocupa trabajaba montando aires acondicionados y nos muestra el desgaste del piano con el que la compuso y con el que aún trabaja, al roce de las cremalleras situadas en las mangas de su antiguo uniforme laboral; quizás marchas como ‘La Pasión’, su repercusión como director musical de las Tres Caídas de Triana y su interés por seguir fomándose le cambió la vida por completo

«Llevo un año alejado de las bandas, actualmente dirijo la Orquesta Sinfónica de Triana y mi actividad como compositor y arreglista que me lleva a estar trabajando en la actualidad en otro tipo de géneros como la música clásica, el cine y la ópera dónde ando inmerso con giras y proyectos muy ilusionantes que me tienen totalmente absorbido».

Una vida ajetreada que gira en torno a su gran pasión, la música

«La música para mi es lo mas bonito que existe en la vida, es ese arte capaz de transformar tu estado anímico, de sacarte de un momento malo o al revés, la música es el motivo de trabajar cada día, es mi ilusión»

Aunque lleve un año más alejado de la música procesional es indudable que el estilo que dejó en la última época creo tendencias pero no se siente un referente

«Yo cuando intento inspirarme miro a los grandes... me parece bonito que haya gente que se inspire en cosas mías para hacer su música pero siempre digo lo mismo, yo no soy nadie, lo mejor es que se estudie a los grandes compositores de la historia de la música que es de donde se van a sacar buenas ideas y buenas referencias».

Pese a que ‘La Pasión’ la conocemos hoy como una de las grandes composiciones para música procesional al principio no tuvo una buena acogida incluso en el seno de los propios componentes de la banda

«Creo que éxito ha tenido a posteriori, recuerdo cuando comenzamos a montarla que el mote que le pusieron era “la de los helados” (dice entre risas) porque el arpegio del principio tiene unos intervalos que dan lugar a un sonido muy parecido al del antiguo camión de los helados»

Aun así recuerda que antes de llevarla a la banda vivió un momento especial cuando se la mostró a unos familiares que lo visitaron desde el extranjero

«Antes de montar la marcha, me visitó familia de fuera y les puse la marcha y una de las personas cuando me di cuenta estaba llorando, fue el primer momento en mi vida en la que algo que yo había hecho había sido capaz de llegar a emocionar a otra persona hasta tal punto de hacerla llorar... fue un momento muy importante que me valió para tomar conciencia de la importancia que tiene la música y la creación musical»

‘La Pasión’

‘La Pasión’, marcha dedicada al Stmo. Cristo de las Tres Caídas es una obra de una estructura y unos recursos no muy comunes para su época, comenzando por el arpegio de su inicio que además empieza en La bemol mayor, una tonalidad para nada usual en el estilo de cornetas y tambores, además de ser característica la capacidad de Manuel Alejandro de crear melodías simples que calan rápido en el oyente pero que va desarrollando, revistiendo y enriqueciendo dotando sus marchas de una fuerza y complejidad muy identificable que siempre creciendo

Hoy desmontamos ‘La Pasión’, una de las marchas más importantes en la historia de la música procesional moderna.