El Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), entidad adscrita a la Consejería de Cultura de la Junta, y la hermandad de los Negritos han firmado un contrato para la «conservación-restauración» del original manto procesional de la Virgen de los Ángeles. La obra, diseñada en 1958 por Juan Miguel Sánchez y bordada por las Trinitarias durante tres años, fue estrenada en la tarde del Jueves Santo de 1961.
En una nota, el IAPH ha informado de que la propuesta de intervención incluye «una limpieza general» del tejido y de los bordados, «la consolidación y estabilización» de elementos degradados, así como la eliminación, «de forma controlada», de los depósitos de cera. Asimismo se elaborará «un nuevo planteamiento expositivo» de la obra y se estudiará «el sistema de iluminación más conveniente».
Pese a que se ha asegurado que la pieza se encuentra en «aceptable estado de conservación», acumula una capa de suciedad superficial, «producto del uso y manipulación que ha generado una acumulación de partículas y de otros elementos sobre las fibras de los tejidos y los bordados». De igual manera, los técnicos del IAPH han detectado depósitos de cera en algunas zonas, e «hilos y elementos sueltos» provocados por tensiones o roces. «La intervención se basará en el respeto absoluto por el original y en la conservación de este bien cultural para garantizar su perdurabilidad en el tiempo», han subrayado desde el IAPH.
Esta intervención va a suponer «un importante avance» en el conocimiento del manto, «único tanto desde el punto de vista material y técnico como histórico y artístico», al ser la primera vez que se aborda su análisis y estudio desde una metodología científica. El estudio histórico-artístico analizará los principales valores culturales de la obra. Tanto la documentación gráfica como técnica que genere el proyecto contribuirá en un futuro a facilitar las investigaciones y análisis comparativos que sobre este tipo de obras se realicen.
Este manto sustituyó al de Rodríguez Ojeda de 1916, en terciopelo azul y bordado en oro, con el que procesionó hasta 1960 Nuestra Señora de los Ángeles. En el diseño del pintor Juan Miguel Sánchez se puede apreciar una obra original alejada del clasicismo de los bordados de época barroca, con una interpretación personal basada en elementos decorativos florales y vegetales de clara estética modernista, muy próxima a la pintura de cartel y mural que desarrolló. Significó un gran avance en los bordados de mediados del siglo XX en la escuela sevillana.