«El plan de la Madrugá ha funcionado y, por tanto, no debiera cambiarse»

Sobre la mesa de su despacho ocupan un lugar preeminente un libro de pastas amarillas del Código de Derecho Canónico, una copia de las Reglas de la Macarena y un ejemplar del programa de gobierno con el que concurrió a las elecciones. En este último, por pura deformación profesional, este ex director territorial de Mapfre en Andalucía y Extremadura, tiene punteados a bolígrafo los compromisos ya cumplidos.

Pregunta: ¿Qué balance hace de sus primeros meses de mandato?

Respuesta: Estamos en la línea del cumplimiento de objetivos previsto, con un porcentaje alto al momento en el que estamos hablando: de los 37 compromisos que citamos por escrito en nuestro programa llevamos cubiertos o en proceso de cumplir 28, lo que significa un 62%. Y eso, para haber empezado a gobernar casi en diciembre, nos parece un grado de cumplimiento alto.

P: ¿Cómo ha vivido personalmente su primera Semana Santa como hermano mayor?

R: Muy sereno, muy tranquilo. Responsable y comprometido, pero muy sereno. Yo manejo un dato: esta hermandad se fundó en 1595 y aquí nunca ha pasado nada. Nadie ha dado chocazos con los pasos y no conocemos nada raro, salvo que algún día nos sorprenda la lluvia. Pero yo me decía, la hermandad saldrá de una manera o de otra, con un capataz o con otro.

P: El nuevo recorrido de la hermandad por la zona de la Alfalfa ha despertado grandes elogios.

R: En la última reunión en el Consejo de hermanos mayores de la Madrugá todos estaban tremendamente agradecidos por el esfuerzo de la hermandad de la Macarena. Y también entre los hermanos de la Macarena la satisfacción es general. Ni siquiera los que pensaban de forma contraria o con un programa distinto están disconformes. Creo que el recorrido le ha gustado a todo el mundo. Eso es bueno porque satisfacer a todo el mundo en una hermandad de más de 14.200 hermanos es muy complicado.

P: ¿Seguirá apostando la hermandad por este itinerario?

R: Sí. Rotundamente sí. Y así lo he anunciado ya a los hermanos mayores de la Madrugá. Ustedes pónganse de acuerdo en la línea que deben. Y para que ustedes puedan trabajar a gusto, ya les informo que nosotros el año que viene seguimos por la Alfalfa.

P: ¿La decisión de no transitar bajo el Arco a la salida de la cofradía también se mantendrá?

R: Sí. Hay una cosa que o no hemos informado debidamente o a la gente no le ha quedado claro. Y es que la hermandad de la Macarena salía siempre por la calle San Luis. En el año 1961 una junta de gobierno decidió cambiar el itinerario y empezar a salir de frente. Y es en el año 1986, a raíz de que el Ayuntamiento ponga una isleta con el acerado elevado sobre el asfalto, cuando la cofradía empieza a discurrir por el Arco. Desaparecida esa isleta, este año hemos vuelto al itinerario antiguo. Entonces ¿qué es tradición: 30 años o 300 años? Y hay otra cosa muy importante: saliendo de frente el círculo de visión del público que está en la explanada es de 360 grados. Es pensar en la gente también. Y desde luego, no es faltar a la tradición, es volver a la tradición.

P: Este año, además, han clavado los horarios.

R: El de entrar a la una era un compromiso que adquirimos y que debíamos cumplir. Y hemos entrado a la una. Me sorprendo que por cumplir lo que dijimos que íbamos a hacer la gente lo considere algo extraordinario.

P: ¿Podría esta junta plantearse en el futuro algún mínimo cambio de recorrido para visitar otras zonas del barrio?

R: No aún. Nosotros tenemos un objetivo que está por encima de todo: cuidar el cuerpo de nazarenos. Cualquier modificación giraría en torno a cumplir con el horario de entrada a la una. Eso es lo que condicionaría cualquier cambio, que la Virgen esté dentro a la una. La Virgen va a entrar siempre a la una. Y no me atrevo a decir a las doce porque corro peligro de que me fusilen al amanecer (risas).

P: Mientras que otras hermandades optaron esta Madrugá por refugiarse, su hermandad se mantuvo con entereza en la calle. ¿Manejaban algún pronóstico distinto al oficial?

R: Ninguno. Sumábamos todas las informaciones que teníamos. Ese tipo de decisiones pertenecen a la templanza de los hombres y a la creencia de que con los datos que tienes, no debes hacer cosas raras. Y luego hay que tener suerte. No puedo ponerme medallas o galones que no me corresponden. Me preguntaron en la Cuesta del Rosario y dije que la Virgen de la Esperanza se va para su casa. Mire usted, esto es una estación de penitencia y si tengo datos de que la lluvia no es ni persistente ni intensa y que es una cuestión de 20 minutos, lo mejor es tomar la determinación que tomamos. Y nos acompañó la suerte.

P: La sensación generalizada es que el plan ensayado este año para la Madrugá aporta mejoras sustanciales. ¿Cree usted que tiene visos de futuro?

R: Yo lo que creo es que ha funcionado y creo en el sentido común y en la responsabilidad de todo el mundo. El plan ha funcionado y eso está claro. Si coges los números y salvo los incidentes por la lluvia, la Madrugá ha sido perfecta, incluso en un aspecto vital, el del respeto a los tiempos. Si esto ha funcionado, no debiera cambiarse. Pero como no puedo hablar por los demás, hablo por la Macarena. A la Macarena le ha ido de maravilla ir por la Alfalfa y, en consecuencia, la Macarena volverá a ir por la Alfalfa. Y entiendo que la Madrugá aplicará este mismo plan. No sé si se hará algún cambio leve o mínimo, pero no creo que cambie mucho porque nos ha ido bien a todos.

P: Porque lo de la Madrugá al revés ¿usted lo ve o no lo ve?

R: No. De hecho, lo he dicho. Los estudiosos dicen que la Madrugá al revés sería factible, pero yo no le veo ni me veo al revés.

P: ¿Ha percibido usted un cambio en los andares de los pasos?

R: Hay que ser sinceros. Yo no he percibido ningún cambio sustancial. Yo miro poco para atrás, pero he visto a la Virgen andar bien, como siempre la he visto. Me preguntas ¿has visto andar a la Virgen un poco mejor? Más que andar un poco mejor, lo que he visto ha sido una gran identificación de la cuadrilla y un gran ambiente. Eso se percibe en las caras, los comentarios de la gente cuando entran y salen. Lo que he visto es un aspecto relacional de la cuadrilla estupendo.

P: Parece ser que el paso de palio va a sufrir alguna modificación en la parte que no se ve...

R: La gente habla de eso, pero la junta de gobierno no ha tomado ninguna decisión al respecto. Es verdad que estamos reflexionando sobre ello. ¿Son siete trabajaderas las que debe de llevar? ¿Con siete trabajaderas están cómodos los costaleros? Todavía no hemos adoptado ninguna decisión. Yo, personalmente, cuando era costalero iba muy bien con seis, pero estás hablando con un costalero que siempre fue con seis trabajaderas y con una cuadrilla y media, no con dos.

P: Fue uno de sus compromisos más aireados: la creación de una residencia para los veteranos macarenos. ¿Cómo marcha ese proyecto?

R: Ahora mismo ese proyecto maneja cinco posibles modos. Acceder a una residencia en puridad de concepto es algo que exige un presupuesto económico, una planificación adecuada, una estructura de edificio, una aprobación por la Junta de Andalucía. Te puedo decir que es a lo que más horas dedico, pero vamos por partes. Tenemos estudiado el modelo de centro de día, que es un paso previo a la residencia, y visto posibles locales. Tenemos estudiado el modelo de centro o piso de acogida, donde en función de su capacidad podríamos tener cuatro, cinco o siete familias recogidas. Tenemos también estudiada la vía de tener la residencia en colaboración con algún convento. Y finalmente, tenemos estudiado el modelo de residencia pura. Esto es costoso y necesita unos condicionantes de la Junta de Andalucía cuyo logro es laborioso, no sólo en el aspecto económico. Algo que yo tengo en el corazón y en la mente debo de tener cuidado a la hora de implantarlo sobre todo por la herencia que deje en el legado cuando ya no esté aquí. A mí la vocación de la residencia me viene de la experiencia de la Asistencia Social. Hoy en una residencia normal no encuentras una plaza por menos de 1.700 o 1.800 euros. Puedes encontrar algo mejor en la Caridad o en el Pozo Santo, pero están saturados.

P: ¿Y entre todas ellas, qué opción ve más factible para llevar adelante este proyecto?

R: El asociacionismo. Es decir, buscar una residencia que esté funcionando, que no esté ocupada entera y que tú puedas entrar en asociación con tu nombre, Esperanza Macarena. Y con el aporte capital que fuera necesario. Esa es una vía a explorar, porque hay algunas residencias muy buenas que no están completadas. Si llegamos a un concierto con una residencia que está acreditada por la Junta, la Junta ya te ayuda.

P: ¿Hay fecha para la inauguración de la plaza Esperanza Macarena?

R: Inminente. Hemos estado esperando a que terminen las fiestas, y el Ayuntamiento pondrá en breve la fecha. Si te das cuenta, ya está terminada.

P: Dentro de la reforma que está emprendiendo la hermandad para aglutinar a sus diversos colectivos, también han empezado a obrarse cambios en la banda de la Centuria. ¿Hasta dónde alcanzarán esas modificaciones?

R: La banda tiene como objetivo un mayor desarrollo artístico de la misma, incluso hasta incrementar su número de componentes. Ahora están grabando un disco. Eso, más cornetas y más tambores, son cosas de ordinario y lo puede hacer cualquiera. Generar un buen ambiente en la banda o mejorar el excelente ambiente que tienen, insertarlo dentro del discurso de la hermandad, es otra cosa. Y a mí me ocupa más eso. Que sus responsables, Pepe Hidalgo o Paco Morata, vean al hermano mayor cerca. No concibo a la hermandad yendo cada colectivo por un lado, no son islas con un discurso extraño o distinto.

P: Horas después de ser elegido como hermano mayor señaló que su reto era que soplaran aires nuevos en el atrio con un peso muy importante del concepto hermandad. ¿Lo está consiguiendo?

R: Sí. Tengo unas relaciones estupendas con todos mis hermanos, con los que están conmigo en la junta, con los que estuvieron en otras juntas y con los que fueron mis oponentes en las elecciones. Eso sí lo estoy consiguiendo. De hecho, en cada acto de la hermandad, yo siento juntos a los tres hermanos mayores y al teniente Álvaro García Carranza, y Santi está invitado siempre. Están invitados siempre los cinco a sentarse en el primer banco en cualquier culto de la hermandad. No me entra en la cabeza una hermandad que no haga eso, que orille a todos los que fueron en su día oficiales de junta. No se pueden marchar de la hermandad y perder ese valor, es como un capital intelectual que tú abandonas. No se puede, porque eso no es hermandad.

P: ¿Para cuándo la inauguración de la remodelada casa de hermandad?

R: La casa de hermandad va a ser un éxito, porque a esta fecha no tenemos ningún desvío económico sobre el presupuesto ni sobre los plazos previstos. Y eso es un milagro. Dijimos que la inauguraríamos en junio y así será. Aportará confort a los hermanos, funcionalidad y accesibilidad a todos los departamentos gracias a su distribución. Tendrá hasta biblioteca, que nunca la ha tenido, para que los hermanos puedan leer y relajarse.

P: ¿Qué cree que pasará con los restos de Queipo de Llano?

R: La tumba del general es un tema que nos ocupa, no que nos preocupa. Y nos ocupa el poder resolverla. Entre los 14.213 hermanos que tiene la hermandad tenemos sentires distintos a los que hay que atender. Luego tenemos también observaciones por parte de la administración pública en su campo. Y finalmente tenemos lo que dice la ley. La única institución que puede dirigirse a nosotros es la Junta de Andalucía, y todavía no lo ha hecho oficialmente, salvo en unas declaraciones que conocí por ahí del vicepresidente en su momento. Y después de todo esto está también el derecho de la familia, con la que habría que conversar. Esa es una vía necesariamente explorable. Lo que pase dependerá de la familia, de lo que dictamine la ley y de la capacidad de gestionar eso por parte de la junta de gobierno atendiendo el sentir y criterio de los hermanos. Y ahí hay de todo: a los que les gusta y a los que no. La decisión, cuanto menos, es compleja, porque no vas a dejar a todos los hermanos satisfechos.

P: ¿Y qué dicen los abogados de la hermandad al respecto?

R: Pues dicen que es la Junta de Andalucía el único organismo que puede dictaminar o instruir una orden, no otro organismo. Lo que pasa es que en estas situaciones no tienes que esperar siempre, exclusivamente, el dictamen de la ley, sino atender también a los sentires y sensibilidades. Y eso es lo que estamos manejando.

P: Se habrá percatado de que aún no le he preguntado por algunas fotos impropias que han circulado de los armaos...

R: No me preocupa que me preguntes. Ya se les ha llamado...

P: ¿Entiende que no son de recibo esas fotos?

R: Son impresentables. Si no es de recibo un armao en su casa haciendo un uso indebido de su vestimenta, imagínate lo otro. Ya se les ha llamado y se han tomado las medidas oportunas.

P: ¿Sigue creyendo que no es necesario sacar a la Virgen en procesión extraordinaria en 2020 para celebrar el 425 aniversario fundacional?

R: Lo que sigo creyendo es que no tengo necesariamente que salir con la Virgen. Salir con la Virgen es un modo de evangelizar y de concebir la hermandad. Si hay que hacer cosas y a los hermanos les gusta, se hacen. Pero a los hermanos les propondré, se me ocurre ahora, ¿y si hacemos un seminario sobre mariología? ¿Y si hacemos una sabatina al año en la que venga un gran experto a interpretar las escrituras? ¿Y si hacemos una jornada al mes trayéndonos a grandes autores del tratamiento de la conducta humana, caso de Enrique Rojas, Bernabé Tierno o Julián Marías? Estoy pensando en voz alta. ¿O por qué no buscamos a doce predicadores importantes para que la última sabatina del mes tengamos una predicación especial? ¿O por qué no abrimos el camarín de la Virgen todos los días en lugar de sólo sábados y domingos? Te garantizo que cuando llegue el 2020 seremos prolíficos en la generación de actividades.

P: ¿Qué le transmite el arzobispo de Sevilla acerca de ese modelo de hermandad fraterna, caritativa y social que usted pregona?

R: Aparte de un gran respeto, guardo una íntima relación con el señor arzobispo. En cierta ocasión me preguntó si era consciente de las expectativas e ilusiones que había generado. Le respondí que sí era consciente y que daría respuesta a esas ilusiones y a esas expectativas en contra de toda adversidad y de los charcos que tenga que pisar. Del señor arzobispo tengo mucho cariño y mucha ayuda.