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En la Catedral
Miguel Andréu en un momento del Pregón de las Glorias, que pronunció ayer. / Foto: Manuel Gómez
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Virgen del Reposo
Imagen de la dolorosa de Arteaga con los ojos verdes que será bendecida hoy en La Corza. / Foto: M.G.
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Virgen del Mar
La parihuela del paso ya está en la iglesia de la Mi- sericordia para el estreno del 13 de mayo. / Foto: M.G.
Glorias 2017: El canto de aquel «chiquillo» de San Esteban
Miguel Andréu despliega en el atril todo su saber de las Glorias y de la ciudad con un texto comprometido y alegre que no olvida a quienes le enseñaron a querer a la Virgen.
Alegre, comprometido, escrito con la fe y el amor a María, y el orgullo de contar lo que lleva dentro desde que era «un chiquillo» con la Luz de San Esteban o ya luego con Los Humeros y el Amparo. Miguel Andréu invitó ayer en el Pregón de las Glorias a vivir «el dulce despertar» de un nuevo tiempo «que huele a nardo y clavel» y que está encardinado en esta ciudad, «que es una gloria con las Glorias de Sevilla». Ante la Virgen de Guadalupe de San Buenaventura en la Catedral, comenzó recordando la «valentía» de las ocho mujeres del Antiguo Testamento que custodian el camarín de la patrona extremeña para remarcar que las Glorias fueron «pioneras en la incorporación de la mujer en las juntas de gobierno». Por ello imploró a la Virgen «que siga dotando a las hermandades de mujeres de nuestro tiempo y valientes» con la posibilidad de que «encabecen una labor social conjunta». Como había previsto, nombró a cada una de las devociones letíficas, incluidas las titulares de las penitenciales entre las que citó a la Inmaculada Milagrosa del Tiro de Línea, que anhela «ver de nuevo por las calles». Para expresar su predilección por «la tierra de María Santísima», citó frases de las sagradas escrituras, de los papas Juan XXIII o Francisco, y de otros enamorados de Sevilla, como el chef Ferrán Adriá, Lola Flores o el pregonero Alberto García Reyes («Siempre como ahora y mejor cuando Dios quiera» ). En la acertada combinación de prosa y verso, fueron muy aplaudidos los sonetos de las «siete flores» del Rosario y el romance del Carmelo: «Y aunque ya no tengas puerto/ con pescadores de barcas/ Tú siempre tienes San Gil/ San Leandro/Calatrava, tienes Santa Catalina/ y también tienes Triana/ ¡Porque a querer a la Virgen/ a eso nadie te gana!». Pese a no ser muy rociero, echó mano de coplas de Rafa Serna o Rodríguez Ferrera para pedir a su ahijado, Ignacio, que apadrine su camino «del Salvador al Rocío». También tuvo recuerdos a su esposa, Carmen, a sus padres, a su eterno hermano mayor, Manolo Marcos; y el sacerdote Carlos Martínez asesinado brutalmente hace dos años. No dudó en denunciar en el atril el aumento del laicismo, la persecución de cristianos y el aborto. El final estuvo dedicado a la hermandad que dirige actualmente, fundiendo a «la Divina oficiala del taller» con el gremio de los Sastres que va más allá de los pespuntes, y que «a septiembre le ha cortado unas enaguas de primavera».
Bendición
Una dolorosa de Arteaga para La Corza
Ha estado 14 años en el taller de Navarro Arteaga, salvo un tiempo que residió en el colegio de los Salesianos de Triana. Ahora ha encontrado un destino en un barrio junto a la Carretera de Carmona. La Virgen que en 2003 se concibió como una de las posibles dolorosas de la Cabeza de las Siete Palabras –también hubo otras opciones con Miñarro y Álvarez Duarte– será bendecida este mediodía en La Corza bajo la advocación de Nuestra Señora del Reposo. De momento será titular de la parroquia aunque en un futuro podría formar parte de la antigua hermandad Sacramental del Sagrado Corazón que está en vías de reactivarse tras un periodo de letargo. Hasta el momento un cuadro de la antigua Virgen del Reposo, patrona de Valverde del Camino, presidía el altar mayor. «Los vecinos tienen mucha ilusión. Una imagen de talla siempre nos ayuda más a llegar a la Madre de Dios. Con su llegada, el culto a la Virgen aumentará en la parroquia», ha explicado el párroco Alfredo Morilla, que desde su llegada hace tres años ha reactivado la feligresía, con la recuperación de la procesión del Sagrado Corazón de Jesús o el apoyo al coro de campanilleros del barrio las pasadas Navidades. Ahora ha logrado que por suscripción popular la parroquia adquiera esta imagen que dicen es una de las mejores dolorosas contemporáneas. «Tiene mucha personalidad aunque sus ojos verdes no es lo que más llama la atención de la expresividad de la cara. Cuando la hice me acordé de mi madre. Le puse las mismas arrugitas que se le hacían a ella encima de los párpados», revela su autor, que está convencido de que «va a ser una Virgen muy querida». Tanto que en estas semanas previas a su venida un grupo de feligresas se ha encargado de confeccionar un manto de terciopelo liso para la ceremonia de bendición que se desarrollará en la misa de las doce y en la que intervendrá la coral de la hermandad de la Amargura. Luce además la corona de salida del Amparo de la Magdalena, un fajín de la dolorosa de San José Obrero y la peana de la Virgen de las Lágrimas de la Exaltación, como se ve en la imagen de la derecha. Del atavío se ha encargado el antiguo prioste de la Amargura, Jesús Mejías. La Corza presume ya de Madre.
Suena el martillo
Más de 50.000 visitas en 2o días. Es el primer balance de la muestra conmemorativa del IV centenario del Cristo de los_Desamparados en el Santo Ángel.
Pese a que los farolillos ya asoman, lo cierto es que en la Misericordia surgen los preparativos para la procesión de la Virgen del Mar, la nueva Gloria de Sevilla.
Los que han pasado estos días por la Basílica han podido disfrutar de la Esperanza fuera de la embocadura debido a mejoras en la cúpula del camarín.