Guía cofrade (338): Apócrifos

Son los libros sobre la vida de Jesús de Nazaret que la Iglesia no incluye entre los oficiales al considerar que no fueron inspirados por Dios

20 ene 2018 / 09:00 h - Actualizado: 20 ene 2018 / 20:50 h.
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  • El personaje de la Verónica, en el cortejo procesional de la Hermandad de Montserrat. / El Correo
    El personaje de la Verónica, en el cortejo procesional de la Hermandad de Montserrat. / El Correo

Los evangelios apócrifos son aquellos no canónicos, esto es, los libros sobre la vida de Jesús de Nazaret que la Iglesia no incluye entre los oficiales al considerar que no fueron inspirados por Dios o, más claramente, que hay dudas sobre su veracidad o autoría, que resultan excesivamente fantasiosos para lo que es el tema y, sobre todo, que sus doctrinas van contra la establecida o la ponen en duda. Estos otros textos, muy abundantes y diversos, inspiran algunas de las escenas que hoy se pueden ver encima de los pasos de la Semana Santa de Sevilla y que no aparecen reflejadas en los canónicos –es decir, los evangelios de Lucas, Mateo, Marcos y Juan– o no lo suficientemente desarrolladas. Es el caso del pasaje de Dimas y Gestas, explícitamente recogido en el misterio de la Conversión del Buen Ladrón de Montserrat. Igual sucede con el paso de la Sentencia; solo en las fuentes apócrifas se da a entender que hubo una lectura pública de la condena, asunto que ni se sugiere en los canónicos. El emotivo suceso del paño de la Verónica: otro caso remarcable que solo se puede leer en el Evangelio de Nicodemo, y que tiene de simbólico hasta el nombre de la protagonista, Verónica, Vera Icona, o sea, verdadera imagen. Por otra parte, en la Biblia aparece un centurión romano que atraviesa el pecho de Jesús, pero la historia de Longinos no se conoce hasta varios siglos después, con las apócrifas Actas de Pilatos, y ahí se puede ver en el paso de la Lanzada. Y no acaba ahí la influencia de esos otros textos sobre los misterios procesionales hispalense: la Sagrada Mortaja, el Duelo, el Traslado al Sepulcro... beben de las mismas fuentes. Si eso no es sinergia, que venga Dios y lo vea, aunque sea de forma apócrifa