Guía cofrade: Capataz (49)

Prosigue la Guía Cofrade de El Correo para saber de la Semana Santa sevillana tanto como los especialistas de El Correo de Andalucía

27 ene 2017 / 17:20 h - Actualizado: 27 ene 2017 / 17:20 h.
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  • El capataz, de traje negro, da indicaciones a los costaleros de El Cerro. / Inma Flores
    El capataz, de traje negro, da indicaciones a los costaleros de El Cerro. / Inma Flores
  • El capataz da órdenes a los costaleros.
    El capataz da órdenes a los costaleros.

Los capataces en la vida ordinaria, civil, alejada del universo cofrade, son aquellas personas que tienen por oficio guiar, organizar, mandar o dirigir a un grupo de trabajadores de una actividad laboral concreta. Y realmente en esa definición encontramos el origen de las personas que actualmente mandan los pasos de nuestras cofradías. Traídos de forma habitual de los oficios vinculados a la carga y descarga del muelle del río, los capataces –al igual que los costaleros– eran hombres contratados para llevar a efecto el trabajo de sacar los pasos y gobernarlos por las calles hasta el regreso de las cofradías a las distintas sedes canónicas. Así, era muy frecuente que fueran los capataces quienes buscaran, entre sus peones conocidos del trabajo diario, a los hombres que vestirían el costal para completar el encargo de llevar los pasos en Semana Santa. Es, por tanto, el capataz aquel hombre que manda, organiza y gobierna al colectivo de la cuadrilla de costaleros.

Entre sus primeras misiones se encuentra la de igualar a los costaleros. Esto es designar, en función de la altura de cada uno y la ubicación exacta de su cerviz, el lugar que ocupará debajo del paso. Los capataces cuentan con ayudantes en su equipo. Los cargos más habituales son los de segundo capataz, que es hombre de máxima confianza hasta el punto de suplir al titular en determinados momentos, el listero, aquel que controla los nombres y la asistencia a los ensayos, y los contraguías, ayudantes que ocupan la parte trasera del paso, en ambos zancos y que remarcan las órdenes y ayudan desde la perspectiva que da la parte final del mismo.

El capataz ocupa la parte delantera del paso, se ubica justo al frente del mismo para tocar el martillo o llamador, y se encarga de mandar, ordenar la dirección y la velocidad del paso, decidiendo además cuando éste se detiene o se levanta y comienza a andar. De manera prácticamente unánime los capataces visten traje de chaqueta negro con corbata del mismo color y camisa blanca.

Es muy frecuente la participación de capataces de saga familiar. A lo largo de los años el cargo de capataz ha sido enseñado de padres a hijos promoviendo así que existan familias en las que el oficio de capataz cobra un sentido fundamental.