Es otro de los lugares de visita obligada para los peregrinos que ponen sus pies en Jerusalén buscando las huellas del Nazareno. Construida sobre el costado oriental del Monte Sión, a las afueras de las murallas de la ciudad vieja de Jerusalén, la iglesia de San Pedro en Gallicantu conmemora la triple negación de Cristo por el apóstol Pedro. El escenario de la desgracia de Pedro fue el patio de la casa del alto sacerdote Caifás. La congregación francesa de los Asuncionistas, que levantó esta iglesia sobre las ruinas de una basílica bizantina, cree que está construida sobre el lugar del palacio del alto sacerdote. Sobre su techo se alza un gallo dorado, encima de una cruz negra, recordando la profecía de Cristo de que Pedro lo negaría tres veces «antes que cantara el gallo». Después de que Jesús fuese arrestado en el Huerto de los Olivos, el reo fue conducido hasta la casa de Anás donde fue detenido, interrogado y golpeado. Anás se lo envió atado a Caifás, que lo estaba esperando con los miembros del senado. Allí fue el juicio ante el Sanedrín judío, antes de ser enviado ante Pilatos. Bajo la iglesia se encuentra un calabozo que se cree que se trata de la celda en la cual fue detenido Jesús en las horas siguientes a su arresto. En el patio de esta iglesia una estatua representa la negación de Pedro, incluyendo el gallo, la mujer que preguntó al apóstol y un soldado romano. Los asuncionistas son los custodios de este lugar desde el año 1887. Junto a la iglesia se conservan aún los restos de la escalera original de la época de Cristo por la que el Nazareno fue conducido por la guardia judía del Sanedrín después de su apresamiento en el Huerto de los Olivos. En uno de los costados de la iglesia de San Pedro en Gallicantu, se descubrieron unas ruinas que se cree que son de la residencia del Sumo Sacerdote Caifás.