Jubileo en la Catedral de Triana

El arzobispo Asenjo preside la apertura de la Puerta Santa por el 750 aniversario de la parroquia

10 jul 2016 / 22:46 h - Actualizado: 10 jul 2016 / 22:55 h.
"Triana","Religión","Juan José Asenjo"
  • Contraluz del campanario de Santa Ana. Al fondo, la Torre Sevilla. / José Luis Montero
    Contraluz del campanario de Santa Ana. Al fondo, la Torre Sevilla. / José Luis Montero
  • La parroquia de Santa Ana acogió la eucaristía de apertura del Año Jubilar en el 750 aniversario de su consagración. / José Luis Montero
    La parroquia de Santa Ana acogió la eucaristía de apertura del Año Jubilar en el 750 aniversario de su consagración. / José Luis Montero
  • Procesión hasta el templo trianero. / José Luis Montero
    Procesión hasta el templo trianero. / José Luis Montero
  • El arzobispo bendijo la Puerta Santa del Año Jubilar. / José Luis Montero
    El arzobispo bendijo la Puerta Santa del Año Jubilar. / José Luis Montero
  • Las hermandades vinculadas a Santa Ana, presentes en el acto. / José Luis Montero
    Las hermandades vinculadas a Santa Ana, presentes en el acto. / José Luis Montero
  • Juan José Asenjo, bajo el dintel de la Puerta Santa. / José Luis Montero
    Juan José Asenjo, bajo el dintel de la Puerta Santa. / José Luis Montero

Triana tiene una Catedral, la de Santa Ana, que desde este domingo es también templo jubilar para la cristiandad. La real parroquia arrancó los fastos conmemorativos del 750 aniversario de su consagración con la apertura de la Puerta Santa del Año Jubilar concedido por el Papa Francisco con motivo de esta extraordinaria efeméride. Fue el arzobispo de Sevilla, monseñor Juan José Asenjo, quien, con tres golpes secos de su báculo sobre la madera del pórtico de la calle Vázquez de Leca –exornado con guirnaldas de flores blancas y amarillas–, procedía a dar por inaugurado este tiempo de gracia que se prolongará durante algo más de un año, hasta el 10 de septiembre de 2017.

Minutos antes de las ocho de la tarde, la procesión de entrada de la eucaristía partía desde el interior de la capilla de los Marineros, entonando letanías que solemnizaban el momento. Abría el cortejo litúrgico el cuerpo de acólitos de la Esperanza de Triana, al que seguían varios estandartes y representaciones de algunas de las hermandades de penitencia y gloria del barrio. Tras ellos, una decena de sacerdotes, entre los que se encontraban el párroco y los vicarios parroquiales de Santa Ana, escoltaban al arzobispo en su recorrido por las calles Pureza y Vázquez de Leca, que lucían engalanadas con gallardetes desde el Altozano. Junto al cortejo, apenas una veintena de fieles que desafiaban los más de 40 grados de temperatura para vivir en primera persona una jornada histórica para los trianeros.

La importancia de lo que se vivía se notaba también en el interior del templo, repleto de varias decenas de feligreses. Durante su homilía, monseñor Asenjo hizo referencia a la parroquia de Santa Ana como «la gloria y el esplendor» de Triana. Un templo que calificó como una «casa» para los trianeros, en el que «más de 25 generaciones han recibido las aguas del Bautismo, el don del Espíritu Santo en la Confirmación... e incluso muchos han consagrado su amor y despedido a sus seres queridos». Por ello, dijo el arzobispo, «tenemos un motivo para dar gracias a Dios» ya que «todo lo que somos lo hemos recibido de forma gratuita». Un espíritu de «gratitud» que le invitó a pedir que este Año Jubilar tuviera como epicentro «una dimensión espiritual, pastoral y envagelizadora» que fuera más allá de las «preciosas conferencias» programadas.

Amplio programa de actos

Con esta eucaristía, los trianeros dan comienzo al programa de actos con motivo del 750 aniversario de la parroquia, que tendrá continuidad en los próximos días con los cultos a Santa Ana, que en esta ocasión estarán rodeados de una serie de eventos de carácter extraordinario –habrá conferencias, presentaciones, conciertos– que le darán aún más realce. Entre ellos estará la tradicional novena a la abuela de los trianeros, que arrancará este 18 de julio con la presencia de destacados predicadores. Unos días a los que seguirán los Gozos, el besamanos y la función del día 26 de julio festividad de Santa Ana que presidirá este año el cardenal emérito de Sevilla, fray Carlos Amigo Vallejo.

Pero al margen de lo que ocurra en este mes de julio, el Año Jubilar llenará Triana de otra serie de actos extraordinarios como la salida procesional de Santa Ana quince años después de la última en la tarde del 24 de septiembre. El extenso programa conmemorativo incluye, además de actos cultuales, culturales y sociales, la edición de un libro sobre la parroquia, bajo la dirección de Amparo Rodríguez Babío, y la celebración de la exposición Anna Radix Ubérrima en el mes de noviembre, comisariada por el prior de los carmelitas Juan Dobado, en la que podrá admirarse buena parte del tesoro patrimonial del templo con un apartado dedicado a las imágenes barrocas de Santa Ana dispersas por parroquias y conventos