Arrugado, doblada la plancha metálica que soporta la estructura y con los borlones deshilachados. Así terminó el Simpecado de Hinojos la procesión de la Virgen del Rocío del pasado Lunes de Pentecostés debido a la «agresión» de un «grupo reducido de almonteños» que quiso utilizar a la Reina de las Marismas en una disputa por motivos políticos en torno a la marisma y el cuidado de las yeguas criadas en Doñana. Días después es la hermandad Matriz de Almonte la que se ha pronunciado sobre este altercado y lo ha hecho de forma contundente. «Lo ocurrido en el momento de la procesión es un acto desafortunado y lamentable que reprobamos de forma rotunda y taxativa». Así lo ha expresado la hermandad de Almonte en un comunicado hecho público este sábado, en el que también quiere dejar claro que en estos actos que denuncia la hermandad de Hinojos «nada tuvo que ver, ni nada puede reprocharse al pueblo de Almonte ni a la hermandad Matriz». En relación a la autoría de estos hechos asegura que «con independencia de su procedencia, en ningún caso pueden justificarse que se ponga bajo sospecha a todo un puebloe» y añade que los que lo han cometido no representan ni a una mayoría ni a una minoría del pueblo.
Para terminar el comunicado oficial, la hermandad Matriz apuesta por mirar hacia delante y dejar atrás «víctimismos, heridas o agravios, pensando sólo en el futuro y en lo mucho que tenemos en común estos dos pueblos vecinos», puntualizando que a pesar de las manifestaciones «muy desafortunadas» de algunas personas, la Virgen se acercó hasta el Simpecado de la hermandad de Hinojos para rezar la Salve, «como siempre».
Precisamente, este año la filial número 19 recuperaba su lugar tradicional en la procesión respondiendo a la demanda de la hermandad Matriz que planteó esta nueva ubicación con la intención de garantizar la seguridad y facilitar la llegada del paso de la Virgen. Así, en lugar de que la Blanca Paloma tuviera que entrar en la calle Sanlúcar para saludar al Simpecado de Hinojos, la hermandad se colocó al principio de la calle, ya en la esquina con la plaza de El Real. Sin embargo, la disputa entre algunos almonteños que venían con la Virgen e hinojeros derivó en esta agresión que dio la impresión desde la distancia que el Simpecado se inclinaba ante el paso. Hinojos pedirá explicaciones por el accidente a Almonte una vez que haya identificado a los autores de la agresión contra esta pieza que representa a la patrona de Almonte.
MEDIDAS CONTRA LOS AGRESORES
La hermandad del Rocío de Hinojos califica de “vergonzosos” los acontecimientos ocurridos en la madrugada del pasado lunes de Pentecostés durante la procesión de la Virgen del Rocío cuando un grupo de almonteños agredió al Simpecado hinojero y anuncia que está “estudiando tomar las oportunas medidas contra los violentos”.
En un comunicado de prensa hecho público por la junta de gobierno y la hermana mayor de la hermandad, los rocieros de Hinojos aseguran “estar viviendo con gran consternación, pesar y tristeza los vergonzosos acontecimiento ocurridos “, al tiempo que “condenan la actitud violenta de unos desalmados que no son personas de bien, no conocen la misericordia ni representan a la mayoría del pueblo de Almonte”.
Según se relata en el citado comunicado, el Simpecado hinojero se acercó a la Virgen en la plaza del Acebuchal del Rocío “por indicación de un representante de la Hermandad Matriz con la loable intención de facilitar el rezo de la Salve, y es en ese instante cuando unos desalmados atacan y tratan de tirar nuestro Simpecado, por lo que se regresa a nuestra casa de hermandad para evitar más prejuicios”.
“Nuestra sagrado Simpecado es la representación de la Virgen del Rocío en nuestra hermandad y en nuestro pueblo, por ello, se van a valorar los daños materiales causados, puesto que los daños morales ocasionados son inconmensurables, y se está estudiando si tomar las oportunas medidas contra los violentos”, advierten en el comunicado difundido.