La Madrugá: el único acuerdo posible

Seis horas de reunión y un desgaste excesivo entre los negociadores para llegar al previsible punto de partida. No es la solución ideal, pero tampoco hay más cera que la que ardía. Con la actual configuración de orden de las hermandades, la Madrugá tenía pocas alternativas más, por no decir ninguna, de cerrar un acuerdo mínimamente razonable que le permitiera salvar la cara ante las autoridades y comenzar a lavar esa paupérrima imagen de división que se había granjeado ante la opinión pública en los últimos años. El objetivo estaba claro: alejar los cortejos unos de otros para cumplir con las premisas básicas de seguridad que se exigían desde el Ayuntamiento. Y aunque El Calvario se resistió hasta última hora a ser la sacrificada, planteando otras alternativas, la altura de miras y esa percepción plural del bien común –un mensaje que ha empezado a calar en esta negociación– acabaron finalmente imponiéndose para cerrar un acuerdo «de mínimos», suscrito con nocturnidad y con mucho más esfuerzo del que parecía inicialmente necesario. El acuerdo redirecciona las pisadas de esparto de los nazarenos de la Magdalena a trazar un rodeo de 550 metros por las calles Gravina, Monsalves y Alfonso XII para llegar a la Campana. Enviando al Calvario por Alfonso XII se consigue descongestionar una zona híper saturada de cofradías y permite que la Esperanza de Triana disponga ahora de al menos 70 metros más –los que ocupaba el cortejo de la Magdalena– para comprimir su cuerpo de nazarenos y así despejar cuanto antes el cruce con el Gran Poder en la calle Zaragoza. Precisamente, uno de los flecos que aún quedan por dilucidar de este acuerdo es a qué hora se fijará el nuevo horario de cruce entre estas hermandades (ahora fijado a las 5.00). A los de Triana se les va a exigir que liberen este cruce conmás antelación –aunque para ello tengan que incrementar en parte su zigzagueo para llegar a Campana–, lo que permitirá de paso al Gran Poder suprimir su rodeo por la plaza del Triunfo. Además de la proverbial actitud del nuevo hermano mayor de la Macarena para desbloquear las negociaciones, renunciando de entrada al mito de la calle Cuna y alejando a su cofradía definitivamente de la iglesia de la Anunciación, la Archicofradía del Silencio ha jugado un papel absolutamente imprescindible para facilitar el acuerdo. Sin recibir nada a cambio, los primitivos nazarenos han asumido dar un segudo rodeo para retornar a San Antonio Abad (140 metros más) con el fin de despejar el tránsito del Calvario hacia la Campana, si bien han solicitado que quede libre la calle El Silencio, por lo que los de la Magdalena podrían llegar a Alfonso XII por Almirante Ulloa. Y una pregunta: ¿Qué hermandad se descolgó pidiendo más minutos a última hora?

El Amor. La película del cuarto centenario

La película del Amor, encargada por el IV centenario de la fusión de las hermandades de la Sagrada Entrada y la del Sagrado Amor de Cristo, se estrenará el 7 de marzo en la Fundación Cajasol. Cuatro siglos de Amor, que así se llamará la cinta realizada por los mismos promotores que La Caja de la Semana Santa, cuenta con un guión de Manuel Jesús Roldán. Sus escenas más impactantes se grabaron este pasado verano a puerta cerrada en la Colegial del Salvador, cuando las imágenes titulares de la Archicofradía se situaron bajo la cúpula central del templo. Los primeros planos del estudio anatómico del Cristo del Amor son realmete sobrecogedores (Stop). Después del último reajuste horario pactado en 2015, el Domingo de Ramos, con su delegado a la cabeza, José Manuel Albiac, andaba intentando cerrar en estos días un posible acuerdo para dar un poco de oxígeno a los tres cortejos más reducidos de la jornada. El baile horario sólo era en principio de tres minutos. Se pretendía otorgar un minuto más a Jesús Despojado, La Cena y San Roque, hermandades que hace dos años cedieron parte de su tiempo de paso para hacer posible aquel reajuste. Finalmente, el planteamiento ha sido desechado bajo el argumento de que todo nuevo reajuste debe basarse en un nuevo conteo que lo justifique (Stop). Nada que ver con el monumento que le levantaron al futbolista luso en su cuidad natal, Madeira. José Antonio Navarro Arteaga es el autor del busto de Cristiano Ronaldo que figura desde hace unos días en el museo del Real Madrid. El escultor sevillano atraviesa una etapa dulce en su carrera, como lo demuestra el reconocimiento unánime recibido esta semana tras la inauguración del monumento funerario a la duquesa de Alba. El retrato ha gustado tanto al futbolista portugués que se ha interesado en tener una copia en su casa.

A paso de mudá:
El martes expira el plazo para presentar candidaturas en Los Gitanos. Todo apunta a que habrá un cara a cara entre José María Flores y Antonio Moreno Santaella.

Ninguna de las nuevas propuestas de Carrera Oficial incluye en su trazado la calle Tetuán: tiene menos vías de evacuación que la denostada Sierpes.

Los Salesianos del barrio o la capilla del Rocío de Triana. Esas son las dos opciones más probables para acoger la salida de Pasión y Muerte en 2019.