La sonada destitución de Santiago

14 may 2016 / 11:25 h - Actualizado: 14 may 2016 / 11:36 h.
"La Paz","Cuerpo de ciriales"
  • Antonio Santiago, de costalero en la salida extraordinaria de la Paz en 2014. / José Luis Montero
    Antonio Santiago, de costalero en la salida extraordinaria de la Paz en 2014. / José Luis Montero

Alguien podría discutir cómo a sólo seis meses de unas elecciones para las que ya se anuncian dos candidaturas una junta de gobierno prorrogada adopta una decisión tan trascendente, no ya por su naturaleza –el relevo de un simple servidor de la hermandad– sino por la carga histórica y sentimental que lleva aparejado el apellido Santiago al frente de los pasos de La Paz. Pero lo cierto es que las relaciones del capataz con la junta de gobierno se habían vuelto demasiado tensas a raíz de los episodios protagonizados por Santiago en la salida de la cofradía en años precedentes, el último este pasado Domingo de Ramos ante el misterio de la cofradía cuando la banda empezó a atacar la Marcha Real antes de que completase la maniobra de salida. En La Paz no entendían por qué actuaba así en el Porvenir –junto a la Macarena y La Resurección, sus tres hermandades capitales– y no en otras cofradías. La impresión generalizada es que Santiago se arrogaba en el Porvenir una órbita de poder que no debe corresponder al de un simple capataz. Por delante queda uno de los acontecimientos más importantes de la historia de la cofradía, y dada la tensión creada, la junta de gobierno ha creído conveniente que lo mejor para la hermandad era cerrar un ciclo.