El Consejo propone medidas drásticas para salvar la Madrugá

«La Madrugá de 2018 tiene que ser diferente y para ello será necesario tomar medidas que pueden ser drásticas». No es un simple aviso, es el anuncio de lo que ha de venir. El Consejo de Cofradías, por boca de su presidente, Joaquín Sainz de la Maza, cree llegada la hora de «tomar determinaciones contundentes y firmes». A su juicio, «tiene que haber un antes y un después de lo ocurrido en la Madrugá si verdaderamente queremos preservar la Semana Santa». En declaraciones a El Correo de Andalucía antes de participar en la procesión de la hermandad del Santo Entierro, Sainz de la Maza ha manifestado que el Consejo, con vistas a la próxima Semana Santa, va a «proponer, siempre de la mano del Cecop y del Ayuntamiento, medidas que pueden ser drásticas y que algunas personas no entiendan, pero que si no hacemos eso nos cargaremos la Madrugá y por ende la Semana Santa».

Según el presidente del Consejo, lo sucedido esta Madrugá «ha sido una cosa muy seria» que debe obligar a la institución cofradiera a «sentarse y analizar profundamente con todas las hermandades de la jornada» los incidentes acaecidos. «La Madrugá ya sufrió en los años 2000, 2005, 2009 y 2015 episodios de avalanchas, pero ésta ha sido la que ha tenido mayor repercusión. Hay dos diferencias respecto a los precedentes de años anteriores: la primera es que por primera vez hay detenidos, y la segunda, y más importante, es la inmediatez y la transparencia de la que han hecho gala las autoridades con esa rueda de prensa del Cecop a las pocas horas de lo sucedido». «Es verdad –reflexiona– que también se han registrado este año sucesos similares en otras ciudades de España, como Cáceres, Málaga y Cádiz también, pero la Semana Santa de Sevilla es muy importante y prueba de ello es que hemos abierto los telediarios de todas las televisiones nacionales». Después de que el propio hermano mayor de los Gitanos, Pepe Moreno, haya reconocido que se llegó a plantear suspender la estación de penitencia de su hermandad, Sainz de la Maza explica que mantuvo una «conversación telefónica privada» con él en la que le recomendó que siguiera adelante «porque de lo contrario, si se volvían para atrás, ganaban los que habían organizado esto. De ahí que para transmitir una sensación de calma, paz y serenidad me fuera a la plaza del Duque para entrar en la Campana junto al hermano mayor, cosa que no hice ni con mi hermandad de la Macarena».

Así pues, Sainz de la Maza asegura que «hay que tomar determinaciones con seriedad pero con firmeza» y anucia que propondrá en la mesa del Cecop la aplicación de «medidas directas en materia de seguridad y que también pueden afectar a los recorridos y a los itinerarios de las hermandades».

Preguntado específicamente por cuáles podrían ser estas medidas, el presidente del Consejo apunta a la aplicación de una posible ley seca en la Madrugá que podría extenderse a toda la Semana Santa, toda vez que el germen de muchos de estos episodios ha estado relacionado con «reyertas y temas de alcohol y siempre en ese horario entre las cuatro y las seis de la mañana». «Se pueden hacer muchas cosas, pero no dependen de mí. Nosotros vamos a proponer medidas que se puedan hacer. Tiene que haber un antes y un después de esta Semana Santa. A partir de lo ocurrido, lo importante es preservar la Semana Santa, aunque ello suponga renunciar entre todos a muchas cosas. Y le puedo decir que el alcalde está de acuerdo conmigo».

Sainz de la Maza felicita a las hermandades de la Madrugá por su esfuerzo ya que, a pesar de estos incidentes, la jornada se cerró con sólo dos minutos de retraso en la Puerta de Palos, y concluye que «quitando estos incidentes, ha sido una Semana Santa maravillosa».