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La Virgen del Rosario de la hermandad del Poligono San Pablo. / José Luis Montero
La hermandad del Cautivo de San Pablo se vio obligada en enero a renunciar al techo de palio para la Semana Santa de este año. Ayer anunciaba un nuevo revés: tampoco estarán las bambalinas. El estreno del conjunto bordado al completo se pospone ahora a 2018, por lo que la Virgen del Rosario Doloroso volverá a salir con el palio liso este Lunes Santo.
En una nota informativa, la corporación que dirige José Luis Pérez ha explicado que en cabildo de oficiales, convocado «con carácter de urgencia» en la noche del martes, se ha decidido «por unanimidad no estrenar nada al no estar finalizado en su totalidad». Previamente el hermano mayor fue citado en el taller de bordados de Charo Bernardino —encargado de hacer esta obra–, donde le fue comunicado «la imposibilidad de tener terminadas totalmente las bambalinas del nuevo palio». Como ocurriera con el techo en enero, de nuevo «el grado de complejidad de estos trabajos, mayor de lo previsto en principio», es la causa principal del retraso.
La hermandad lamenta «enormemente la expectación e ilusión que se ha creado» entre los hermanos y «en toda Sevilla» en torno a este estreno. «Se han ido complicando los trabajos por la complejidad del diseño, ya que las bambalinas van bordadas por las dos caras, como si fuera el trabajo de dos palios», aseguraba el hermano mayor, que ha alabado el trabajo del taller asignado: «Ha estado cumpliendo y trabajando al cien por cien. Incluso plantearon la posibilidad de que pudieran salir sin terminar».