Un cincuentenario de cine

Se estrena el martes y es tanta la expectación que ha levantado que la hermandad la proyectará en doble sesión en Capitanía General, lugar escogido para la premiere, y posteriormente durante algunas fechas en el salón de la casa de hermandad para que ningún hermano se quede sin verla. Carlos Valera, el alter ego de Carlos Colón en los títulos de crédito de la filmografía cofradiera más reciente de esta ciudad, debuta como director con la película Crónica de la coronación. Cincuenta años de una época, una cinta filmada por encargo de la hermandad con el objeto de inmortalizar los fastos de aquella bendita semana de mayo de hace un año en que la Esperanza Macarena se trasladó primero a la Catedral y luego a la Plaza de España para conmemorar las bodas de oro de su coronación.

Valera ha rizado el rizo para condensar 120 horas de grabación en dos horas y cuarto de metraje plenas de «tensión emocional» y en las que se cuentan casi de forma simultánea dos historias paralelas que van entrelazándose: la de cómo se fraguó la coronación canónica de 1964 y la de cómo medio siglo después se ha conmemorado el cincuentenario de tan relevante acontecimiento en la historia de la hermandad. Y todo ello contado en primera persona por la voz de sus protagonistas. «He querido que sea el macareno, el pueblo en primera persona, quien cuente al mundo sus vivencias y sus sentimientos. No debemos olvidar que la Virgen de la Esperanza, antes que canónicamente, fue coronada popularmente por el pueblo en años donde reinaba la necesidad», apuntas Valera acerca de la que es la tercera película que realiza para la hermandad de la Macarena.

¿Un documental histórico? ?¿Una crónica audiovisual de la coronación? Hasta al padre de la obra le resulta difícil encuadrar la película en un género concreto. Admite que tiene «un alto contenido documental», de hecho se podrán apreciar imágenes inéditas gabradas hace 50 años por un hermano tanto del triduo, como de la coronación y de la procesión de vuelta de la Virgen. «Se ha hecho un laborioso y costoso trabajo de recuperación para obtener este documento de más de 25 minutos a color». Para la ambientación musical de la película se han escogido obras de Turina, y más concretamente de su composición Primavera sevillana, aunque también tendrá una gran presencia «la música en directo dedicada a la Virgen de la Esperanza».

Aunque la película está llena de momentos emotivos, para su director «quizás lo más espectacular sean las imágenes del besamanos de la Esperanza Macarena en la iglesia del Sagrario grabadas con una cabeza caliente tanto con público como a puerta cerrada, tres días de besamanos con jornadas de más de 15 horas y en las que la Virgen no estuvo sola ni un solo minuto».