«Ferozmente satírico». Así es como le gusta definir a su criatura Rafael Iglesias. Hablamos del fanzine TeVeo, cuyo próximo número verá la luz el próximo 19 de septiembre en el Espacio Santa Clara. Será un acto en el contexto de la Bienal de Flamenco porque este número –el 16– es el segundo que dedican monográficamente al mundo del arte jondo.
«Sentimos devoción por estar vinculados a este evento», dice su responsable. Sin embargo, TeVeo, como publicación también «radicalmente independiente» va a lo suyo. Y lo suyo, en este caso, es rendir un «sentido homenaje a Benito Moreno y a Ramón Plantón». El primero fue «un grandísimo artista que ha dejado una obra de pintura impresionante, de canciones, de poemas...», recuerda Iglesias. Y el segundo, «Ramón», fue un flamenco underground, de los jondos, «un artista que se quedó enganchado al caballo y que malvivió como un sin techo en la Alameda. Pero lo que salía de su garganta era flamenco puro al 110 por ciento», defiende el editor de una revista «corrosiva» que se vuelve algo más «amable» cuando aborda un tema como el flamenco.
Con colaboraciones de Francisco Correal y Jaime El Gamba, TeVeo puede jactarse de haber contado entre su nómina de colaboradores con periodistas y nombres de la cultura como José María Conget, Daniel Lebrato y Manuel Pedraz. «Cuando lanzamos el fanzine a muchos les pareció una locura que nos planteáramos darle continuidad trimestral. Pero aquí estamos, desde 2013, y con el horizonte de los 20 números a la mano. No aceptamos ni subvenciones ni ayudas, salimos adelante solo con los suscriptores y quienes se anuncian», dice su creador. También con quienes la adquieren, «fundamentalmente en las presentaciones», pero también puede encontrarse la revista en otras ciudades fuera de Andalucía.
«Podíamos haber entrado en la polémica del flamenco ortodoxo frente al heterodoxo. Pero no lo hemos hecho porque soy un convencido de que este arte está vivo y su camino es el de la evolución. El flamenco de raíz es tan maravilloso como el contemporáneo de Andrés Marín y Niño de Elche. Una vez Marín me dijo que él bailaba flamenco como los pintores que pintan abstracto. Y vaya si lo entendí», reflexiona Rafael Iglesias.
Sin embargo, todo no ha sido tan cordial en la historia de TeVeo, una publicación que cita como ilustres referentes a clásicos del periodismo irreverente y mordaz como La codorniz, Hermano lobo o la francesa Charlie Hebdo. Un cartel con la Corona de España tirada en un charco de sangre y otro en el que aparecía el Rey Felipe VI con un gorro de bufón estuvieron colgados por la Alameda de Hércules de Sevilla durante las primeras semanas de junio de 2016 anunciando la presentación del número 8 de la revista TeVeo. Sin embargo, la Policía Nacional retiró los carteles y despertó con ello una «oleada de simpatía» en redes sociales ante lo que Iglesias consideró «un acto de censura propio de un país en el que impera la Ley Mordaza». «Reporteros sin Fronteras y la Asociación de la Prensa de Madrid nos defendieron. Entre muchísima gente más», abunda. Aquel número salió a la luz.