La plaga de lesiones que viene afectando al Sevilla no tiene fin. Este domingo se confirmaron los peores presagios: Marco Andreolli sufre una rotura del tendón de Aquiles de su pierna izquierda y debe pasar por el quirófano. El zaguero italiano permanecerá entre seis y ocho meses de baja, según los servicios médicos. Un nuevo revés que lleva al club a contemplar -que no a decidir- la posibilidad de reforzarse, dado el panorama.
En estos momentos, Unai Emery sólo tiene disponibles a dos centrales: Rami (indiscutible) y Kolo (relegado a la suplencia en los últimos encuentros). Nico Pareja sigue recuperándose de su grave lesión de rodilla y no reaparecerá, en principio, hasta enero. Por su parte, Carriço está próximo a regresar a los terrenos de juego pero su rendimiento es una incógnita, ya que sólo ha disputado un partido (e incompleto) en lo que va de temporada.
La gravedad de la lesión de Andreolli permitiría al club reforzarse sin necesidad de esperar al próximo 1 de enero, día en que se abre oficialmente el periodo de fichajes. Para hacerlo, dicho jugador tendría que militar en un equipo de español (con lo que no necesitaría tránsfer) o llegar libre.
La decisión no es fácil. El regreso de Carriço, al que se espera para esta misma semana, condiciona la idea de fichar. Además, no es fácil encontrar un central de rendimiento inmediato a estas alturas, salvo que se pague una importante suma de dinero por él.
Este miércoles, el Sevilla se juega sus opciones en la Champions, así como las de disputar la Europa League en caso de decir adiós a la máxima competición. En estos momentos no tiene asegurada ninguna de las dos, circunstancia a tener en cuenta también a la hora de estudiar la posibilidad de reforzarse. No es lo mismo seguir adelante en la Champions o en la Europa League que quedar apeado, en cuyo caso sólo quedarían la Liga y la Copa.
UN VIEJO CONOCIDO. El Sevilla intenta ganar tiempo mientras estudia qué hacer tras su enésimo infortunio. La base de datos del club está preparada para ayudar en este tipo de casos. Y dentro de ella, un viejo conocido: Federico Fazio. En el verano de 2014, el argentino se marchó en de forma sorpresiva al Tottenham tras pagar los 10 millones de euros recogidos en su cláusula de rescisión. Sin embargo, su paso por el fútbol inglés no está siendo todo lo brillante que esperaba. La prueba más ilustrativa es que sólo ha jugado un partido en lo que va de temporada... y fue de la tercera ronda de la League Cup, contra el Arsenal.
El Sevilla, donde no gustó nada la forma en que dejó la nave, ha seguido, pese a ello, de cerca las evoluciones del que fuera uno de los pilares del equipo a las órdenes de Emery. Y es precisamente ese conocimiento del argentino lo que le situaría como opción preferencial si el Sevilla decidiera reforzarse, bien ahora, bien en el mercado de invierno. Por ahora, el club intenta ganar tiempo como puede.
