Si usted quiere disfrutar del fútbol sin sufrir, no se haga del Sevilla; y si ya lo es, no le puede sorprender que, pese a ganar por 1-2 en San Mamés, llegase a la prórroga e incluso y a los penaltis en el choque de vuelta tras caer por idéntico resultado. Desde sus orígenes, el Sevilla se forjó a base de sudor, de esfuerzo. Sus títulos llegaron así y ni siquiera en sus mejores días fue ajeno a ese sufrimiento que camina de su mano. Este jueves, jueves de Feria, con tantos y tantos recuerdos presentes, firmó otra página inolvidable. Lo hizo en la tanda de penaltis, donde David Soria, que había errado en los dos goles, detuvo un lanzamiento a Beñat. El único error de un gran Athletic y que Kevin Gameiro no desaprovechó (5-4).

Un ambiente increíble, la afición del Sevilla volcada para llevar a su equipo en volandas, seguidores del Athletic creyendo en la proeza... No pudo tener mejores ingredientes este partidazo, vertiginoso, sin respiro que pasará al recuerdo de todos los sevillistas. Otra semifinal de la Europa más, la tercera consecutiva, donde se enfrentará a uno de estos tres conjuntos: Villarreal, Liverpool o Shakhtar Donetskm (el sorteo, hoy a partir de las 12.30 horas).

Fue un partido de puro corazón que alcanzó el descanso tal como comenzó: con 0-0 y las espaldas en todo lo alto después de ver que tanto el equipo de Emery como el de Valverde dispusieran de ocasiones para zarandear la eliminatoria. De hecho, nada más comenzar, el Sevilla pidió penalti por mano de Balenziaga tras un centro de Mariano en la primera ofensiva local. Toda una declaración de intenciones. Lejos de salir a verlas venir, los nervionenses quisieron sentenciar la eliminatoria por la vía rápida: atacando. Y claro: eso tenía sus riesgos.

Aduriz, referencia de su equipo hasta que se marchó lesionado (69’), tuvo la primera ocasión de la noche. Fue tras recibir un pase, esquivar la salida de David Soria y ver cómo Kolo se lanzaba para sacar el balón cuando se colaba. Un buen susto, aunque no menor que el que se llevó el Athletic cuatro minutos después. Krohn-Dehli, en el costado izquierda pero buscando hacer daño desde el centro, sirvió un gran pase a Rami y éste, de primeras, envió el balón por encima del larguero. Clarísima ocasión a los 9 minutos.

Fue un duelo sin dueño, de réplicas constantes. A la del francés siguió una de Susaeta que Kolo desvió a córner antes de que Krohn-Dehli probase a Herrerín, clave para bien en el Athletic. Raúl García también llevó su parte de inquietud a la grada con un par de acciones en las que el Athletic demostró su convicción en dar la vuelta a la eliminatoria. Los errores nervionenses no fueron ni escasos ni pequeños. Pero también respiró aliviado el conjunto vasco al ver a Herrerín desviar in extremis un remate de Iborra a pase de Gameiro tras el descanso.

Emery quitó a Krohn-Dehli y sacó a Konoplyanka; más velocidad, menos control. El Athletic apretó más, se hizo con la pelota... y Aduriz marcó el 0-1 tras recortar a Mariano y batir a un David Soria que erró al intentar atrapar la pelota (57’).

Todo un jarro de agua fría al que el Sevilla respondió de la mejor forma posible: con otro gol. En un jugadón, Vitolo condujo la pelota de área a área, la abrió a la derecha, Krychowiak centró raso y Kevin Gameiro –quién si no– marcó el 1-1 apenas tres minutos después del 0-1.

Roto por completo el partido, Emery sacó a Cristóforo por Iborra. Había que frenar a los leones e intentar hacer el 2-1 cuanto antes. Ni una cosa ni otra. Gameiro, Vitolo y Konoplyanka crearon peligro al Athletic, al que la lesión de Aduriz –se marchó en el minuto 69– pareció hizo daño. Nada de eso. Raúl García apareció una vez más para marcar de cabeza y sin oposición el 1-2 tras una mala salida de Soria (80’)...

La tensión se cortaba con un cuchillo. Nervios y más nervios hasta llegar a la prórroga. Susaeta perdonó con una vaselina solo ante el portero; Iturraspe estrelló la pelota en el palo al intentar despejar una falta de Konoplyanka un minuto antes de que San José sacara bajo palos una chilena de Coke... Y se llegó a los penaltis, donde todos marcaron menos Beñat, a quien Soria detuvo su lanzamiento antes de que Gameiro, lesionado en el gemelo pero tirando de orgullo, llevase al éxtasis a la afición.

FICHA TÉCNICA.

1 - Sevilla FC: David Soria; Mariano (Coke, m.100), Rami, Kolodziejzack, Escudero; Krychowiak, N’Zonzi; Vitolo, Iborra (Cristóforo, m.67), Krohn-Dehli (Konoplyanka, m.51); y Gameiro.

2 - Athletic Club: Herrerín; De Marcos, Bóveda (Iturraspe, m.60), Etxeita, Balenziaga; San José, Beñat; Susaeta, Raúl García, Lekue (Muniain, m.54); Aduriz (Viguera, m.70).

Goles: 0-1, M.56: Aduriz. 1-1, M.59: Gameiro. 1-2, M.80: Raúl García.

Tanda de penaltis:

0-1: Raúl García.1-1: Coke.

1-2: Viguera.

2-2: Krychowiak.

2-3: San José.

3-3: Konoplyanka.

3-3: Beñat (para el portero).

4-3: N’Zonzi.

4-4: Susaeta.

5-4: Gameiro.

Árbitro: Damir Skomina (Eslovenia). Amonestó a los locales Rami (m.86), N’Zonzi (m.105), Coke (m.114) y Konoplyanka (m.116), y a los visitantes Bóveda (m.28), San José (m.65), Balenziaga (m.74), Viguera (m.86), Muniain (m.94), Iraizoz (m.98) -estando en el banquillo-, De Marcos (m.102) y Etxeita (m.105).

Incidencias: Partido de vuelta de los cuartos de final de la Europa League disputado en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán ante 38.567 espectadores, más de 1.500 de ellos seguidores del Athletic.